OCTUBRE 17

19.02.2021

CIMENTADOS EN LA ROCA " CRISTO ES LA ROCA.

¡Dichosos los que están cimentados en esta Roca, elevan el edificio de la fe en la resurrección y dan testimonio de la divinidad de Cristo! En la Roca, Cristo, aún el gorrión halla refugio y la golondrina un nido para sus polluelos Salmo 83:4.

Y la iglesia, esposa de Cristo, dice: ¡Me pondrá a salvo sobre una Roca! Salmo 27:5 Puso mis pies sobre una ROCA, y enderezó mis pasos. Salmo 40:2 El hombre sabio construye su casa sobre LA ROCA, para que no la destruya ni la violencia del viento ni las inundaciones. ¡Cuantos bienes proporciona LA ROCA! Sobre LA ROCA, yo me levanto, me siento seguro, me mantengo firme; me refugio del enemigo y me protejo de sus ataques, porque yo estoy por encima de la tierra y todo lo que es tierra es perecedero y caduco. Que nuestra vida esté en el cielo y no tengamos miedo de caer ni de ser derribados. LA ROCA, CRISTO, se eleva hasta el cielo y nos proporciona seguridad; es el refugio de los necesitados Salmo 9:9. En efecto, ¿dónde podrá hallar nuestra debilidad un descanso seguro y tranquilo, sino en las llagas del Salvador? En ellas habito con seguridad, sabiendo que ÉL puede salvarme. Grita el mundo, me oprime el cuerpo, el diablo me pone asechanzas, pero yo no caigo, porque estoy cimentado sobre piedra firme. Si cometo un gran pecado, me remuerde mi conciencia, pero no perderé la paz, porque me acordaré de las llagas del SEÑOR. Él, en efecto, fue traspasado por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados. ¿Qué hay tan mortífero que no haya sido destruido por la muerte de Cristo? Por esto, si me acuerdo que tengo a mano una medicina tan poderosa y eficaz, ya no me atemoriza ninguna dolencia, por maligna que sea. Cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; Mateo 7:26 Quienes no están cimentados en LA ROCA, no participan de ÉL, ni nutren su vida con ÉL, tampoco reciben la fuente pura que procede del cuerpo de Cristo. «Cavan para sí mismos cisternas agrietadas» Jer. 2:13, se llenan de pozos terrenos y beben agua corrompida por el lodo del pecado; porque huyen de la fe para que no se les convenza del error, y rechazan el Espíritu Santo para no ser instruidos. Enajenados de la verdad, revolotean de error en error, andan fluctuando, opinando de un modo y otro, según las ocasiones, y nunca llegan a afirmarse en la doctrina estable de la Roca, Cristo. Prefieren ser filósofos de las palabras, a ser discípulos de la Verdad. No están fundados sobre LA ROCA, sino sobre la arena, que esconde muchos sepulcros. Por eso se fabrican muchos dioses. Su excusa es decir que andan buscando, pero como ciegos, de hecho nunca encuentran. Blasfeman contra Dios, que es quien nos concede encontrarlo, creyendo que han encontrado sobre Dios a «otro Dios», «otra Plenitud» y «otra Economía»." Bernardo de Claraval