AGOSTO 26

"TODO ES VANIDAD" Eclesiastés 1:2
VANIDAD, significa cosa vana, inútil y de ningún valor; cosa que se desvanece. LA VANIDAD es una cosa vana que sólo puede agradar á las personas vanas. Dice el salmista: Por tanto, consumió sus días en vanidad, Salmo 78:33 Ciertamente es completa vanidad todo hombre que vive. Salmo 39:5 El hombre es como un torrente que se escapa, como un sueño....como la hierba que por la mañana reverdece; al atardecer se marchita y se seca. Salmo 90:5-6 El hombre, como la hierba son sus días; Florece como la flor del campo, Que pasó el viento por ella, y pereció. Salmo 103:15-16 Que esta sea también nuestra oración; "Aparta mis ojos, que no vean vanidad;" Salmo 119:37. Dice el Espíritu a través del profeta Samuel: "No se aparten de seguir al SEÑOR, sirvan al SEÑOR con todo su corazón. No se deben apartar, porque entonces irían tras vanidades que ni ayudan ni libran." 1Sam.12:21
Vivimos en una época de consumismo depredador. Muchos compran de manera compulsiva, malgastando el dinero en cosas inútiles y que no necesitan, lo hacen para llenar vacíos y escapar de la tristezas. La gente busca comprar lo que no se vende y su deseo la engaña, lo que impide que conozca al Dador de los verdaderos tesoros, Jesucristo, nuestro único Salvador. Dijo el SEÑOR por medio del profeta Isaías: "Vengan, compren y coman. Vengan, compren sin dinero y sin precio, vino y leche." Isaías 55:1 Esta es una invitación para los que tienen sed de la vida eterna, no para los vanidosos, autosuficientes que se creen artífices de su propio éxito.
Vengan es la invitación para los necesitados espirituales. Vengan no necesitan traer dinero. ¡Vengan es gratis! Todo el dinero del mundo no les servirá porque es tan precioso que su valor es incalculable. Vengan para adquirir por gracia, la paz, el amor, el vino del gozo de la salvación. Vengan, lo único que necesitan es su confianza y su fe en el SEÑOR. ¿Por qué gastan el dinero en lo que no es pan, y su trabajo en lo que no sacia? Isaías 55:2 ¿Por qué malgastan su vida en cosas que no cuentan? ¿Por qué gastan dinero en cosas frívolas y caducas y el tiempo en una vida sin propósito?
El rey Salomón nos dice que TODO ES VANIDAD, todo es aflicción de espíritu, cuando nos preocupamos por lo vano y lo material, nuestra alma se seca y nos perdemos de ver todo lo bello que Dios nos ha dado para disfrutar. Coloca tu interés en lo verdaderamente importante; el de buscar a Dios y amarle con toda tu alma, con toda tu mente y con todo tu corazón."Dios es la fuente de nuestra felicidad y la meta de nuestro apetito" Agustin. No es que no tengas las cosas que necesitas para vivir, recuerda siempre que estas cosas están aseguradas, porque son la añadidura de Dios para Sus hijos. Conseguir bienes y cosas corruptibles no debe ser tu único enfoque, porque consumen tu vida.
Busca el reino de Dios y su justicia primero, y encontrarás la paz permanente, la alegría, tendrás una vida sin afanes ni ansiedades, una vida iluminada, más elevada, y rica en bienes celestiales, una vida que los ricos de este mundo anhelan y no pueden alcanzar, por causa de la vanidad, la soberbia y los apegos terrenales. Por eso advirtió el SEÑOR: »Pero ¡ay de ustedes los ricos, porque ya han recibido su consuelo! ¡Ay de ustedes los que ahora están saciados, porque sabrán lo que es pasar hambre! Lucas 6:24-25 El problema no radica en que sean ricos, sino en la idolatría y apego a las riquezas, que les causa ceguera espiritual, y les impide creer en Jesucristo y buscar la salvación.
" Nada puede satisfacer todo el ser del hombre salvo el amor del SEÑOR y el SEÑOR mismo. A Salomón, el más sabio de los hombres, se le permitió hacer ciertos experimentos por todos nosotros y llevar a cabo aquello que nosotros no debemos atrevernos a hacer. He aquí su testimonio contado en palabras textuales: «Y fui engrandecido y aumentado más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; a más de esto, conservé conmigo mi sabiduría. No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena. Miré luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol» Ecl. 2:9-11. «Vanidad de vanidades, todo es vanidad».
¿Qué todo eso es vanidad? ¡Oh favorecido monarca!, ¿acaso no hay nada de valor en todas tus riquezas? ¿Nada en ese dilatado dominio que se extiende desde el río hasta el gran mar? ¿Nada en los magníficos palacios de Palmira? ¿Nada en «la casa del bosque del Líbano»? ¿No hay nada en tu música y tu baile, en tu vino y en tu lujuria? «Nada -responde el monarca-; nada salvo aflicción de espíritu». Este fue el veredicto de Salomón cuando había recorrido todo el camino del placer.
Abrazar a nuestro SEÑOR Jesucristo, permanecer en su amor y estar plenamente seguros de nuestra unión con Él, eso es todo en todo. Querido lector, no necesitas probar otras formas de vida para ver si son mejores que la vida del cristiano: si recorres el mundo entero, no obtendrás ninguna visión semejante a la visión del rostro del Salvador. Si pudieras tener todas las comodidades de la vida, pero perdieras al Salvador, serías un desdichado. En cambio, sí recibes a Cristo, aunque estuvieras en un calabozo, juzgarás ese calabozo como un paraíso; y aunque vivieras en la oscuridad o murieras de hambre, te sentirías satisfecho con el favor y la plenitud de la bondad del SEÑOR. - C.Spurgeon
Toda la obra del hombre, sus logros,riquezas, fama, poder y búsqueda de sabiduría se desvanecerán. La conclusión de Salomón es: "El fin de todo el discurso oído es éste: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre" Eclesiastés 12:13. Nada que podamos procurar y conseguir "debajo del sol" le dará sentido a la vida, porque solo en Dios se puede encontrar la verdadera satisfacción del alma.
" DIOS ES TU TODO: Si tienes hambre, es tu pan; y si tienes sed, es tu agua; y si estás en la oscuridad, es tu luz, que permanece siempre incorruptible; y si estás desnudo, será tu vestido de inmortalidad, cuando todo lo que es corruptible se vista de incorruptibilidad y lo que es mortal se vista de inmortalidad" - Agustín de Hipona