FEBRERO 2

28.03.2021

«Lo llamé, y no me respondió». Cantares 5:6

La Oración a veces aguarda, a semejanza de un peticionario que está a la puerta, hasta que el Rey sale a colmar su seno de las bendiciones que busca. Cuando el Señor ha dado una gran fe, por lo general la ha probado con grandes demoras y permitido que las palabras de sus siervos volvieran a sus propios oídos como si estuvieran llamando a un Cielo de bronce. Sus siervos han golpeado en la puerta de oro, pero esta ha permanecido cerrada; y, al igual que Jeremías, han clamado: «Te cubriste de nube para que no pasase la oración nuestra» Lam. 3:44.

Así, los verdaderos santos han continuado por mucho tiempo en paciente espera, sin recibir contestación, no porque sus oraciones no fuesen fervorosas, ni porque fueran indignas, sino porque así le agradó al SEÑOR, que es soberano y da según Su Voluntad. Si a Él le place ordenar que nuestra paciencia sea ejercitada, ¿no hará como guste con los suyos? Los mendigos no deben elegir el momento, el lugar o la forma en que se les concederá el favor. Sin embargo, debemos tener cuidado de no considerar las demoras en la oración como negativas: Los cheques de Dios con fechas atrasadas se pagarán puntualmente.

No podemos permitir que Satanás debilite nuestra Fe y confianza en el Dios de la verdad, señalando nuestras oraciones no contestadas. Las peticiones no contestadas no indican que no hayan sido oídas. Dios tiene nuestras oraciones en un archivo: No se las llevará el viento, sino que están bien guardadas en los archivos del Rey. Este es un registro en la corte celestial donde cada oración queda anotada. Creyente que has sido probado, tu SEÑOR tiene un recipiente en el cual recoge las costosas lágrimas de dolor sagrado. Salmo 56:8. Y un libro en donde tus santos gemidos quedan guardados. Pronto tu súplica prevalecerá. ¿No puedes conformarte con esperar un poco? ¿No será el tiempo del SEÑOR mejor que el tuyo? Él aparecerá pronto para gozo de tu alma, te quitará el cilicio y la ceniza de tu larga espera, y te vestirá con el lino escarlata y fino del deleite pleno. -Charles Spurgeon"

ORACIÓN ES: Obra espiritual en cuerpo material; vista fija del alma que mira a Dios con ojos de Fe; habla que llega a los oídos de Dios; suave clamor del corazón; atención de todos los sentidos espirituales a la presencia de Dios; olvido de sí mismo y de todas las criaturas; arrepentimiento sincero; desconfianza de sus propias obras; lumbre clarísima del entendimiento; sombra que refresca los ardores de nuestra soberbia, codicia, sensualidad y tibieza; abandono de sí mismo en las manos de Dios, que no quiere otra cosa más que hacer Su santa voluntad." S.Casia