2

06.03.2021

La tierra que van a ocupar al otro lado del río es una tierra de montes y de valles, que se nutre de la lluvia del cielo; es una tierra que el SEÑOR tu Dios cuida: desde que el año comienza, y hasta que termina, los ojos del SEÑOR tu Dios están siempre sobre ella. Deut.11:11-12" ....

Se ha dado la bienvenida a un nuevo año; como todo lo nuevo, es desconocido; estamos llenos de cómo, cuándo, porqué, para qué, y estas preguntas no las podemos contestar, pero tenemos un Padre en los cielos, que no se compara con ningún otro padre, nos ha enviado una promesa; así como les envió a los Israelitas que vayan a tomar posesión de su tierra, tierra que Dios les había prometido, así hoy nos está enviando a cada uno de nosotros a tomar posesión de lo que está por venir. Y ¿porque nos dice que tomemos posesión? Porque Él ya nos la ha dado.

¿Quién es la fuente? ¿Quién es la provisión? ¿Quién cuida? Cada pregunta, tiene una misma respuesta; Dios. "Sus ojos están sobre todas y cada una de tus necesidades y preocupaciones desde que el año comienza, hasta que termina. El SEÑOR proveerá con aquello que necesitamos. Él nos surtirá con manantiales que jamás han de secarse, con fuentes y ríos que permanecerán para siempre. Preocupado: Aquí tienes la promesa maravillosa del Padre Eterno. Sí, Él es la Fuente de nuestras misericordias, éstas jamás podrán faltarnos. Ni el calor, ni la sequía podrán extinguir aquel río "cuya corriente alegra la ciudad de Dios." Hoy estamos a la puerta de un nuevo año, y muchas veces el temor nos acompaña más que sus promesas, pero, tenemos que escoger, ¿Cómo vamos a caminar esta nueva aventura? Por FE o por vista; si es por FE, caminamos con Dios, si es por vista caminamos por nuestro propio esfuerzo. Leyendo estas promesas en el libro de Deuteronomio leemos que Dios nunca daba algo que no había prometido, y sus promesas eran dadas cuando Él ya las había cumplido. Aquí, promete: provisión, cuidado, guía, y es constante, no es un día sí, otro día no, es los trescientos sesenta y cinco del año, desde que el año comienza, y hasta que termina,

Ha comenzado un nuevo año, y con cada amanecer, la luz viene poco a poco, y esa luz que nos es dada nos permite ver lo necesario para caminar. Cada vez que el SEÑOR enviaba un ángel a dar una promesa, siempre decía: NO TEMAS. Y así empezamos este nuevo año: NO TEMAS, porque el SEÑOR tu Dios cuida de ti, desde que el año comienza y hasta que termina. Bendiciones que este año sea lleno de Paz, Amor, y una mente clara para obedecer y caminar tomados de la Mano del SEÑOR.