MAYO 9

Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. Mateo 24:12
Estamos viviendo un tiempo de creciente apostasía y rebelión en la iglesia, que describe a muchos miembros de la iglesia en estos días como "amadores de sí mismos", "implacables", "calumniadores", "crueles", "aborrecedores de lo bueno", "traidores", "amadores de los deleites más que de Dios".2Timoteo 3:1-5
La incapacidad de distinguir lo espiritual de lo carnal, el nombrar diáconos y líderes en lugares de privilegio, que no están comprometidos en verdad con el SEÑOR, ha sido siempre la herida mortal de la Iglesia. Muchos dicen ser Cristianos, pero aún no les ha sido revelado la obra de Cristo en la Cruz, así las iglesias están llenas, pero de gente muerta en sus delitos y pecados. Por esta razón el amor de muchos se enfriará.
¿Quién puede negar que esto está sucediendo hoy? La sociedad continúa cayendo en espiral hacia una oscuridad más profunda casi a diario; y puede ser fácil volverse frío para con cualquier forma de amor. Eventualmente, muchos cristianos terminarán desanimados; de hecho, algunos ya lo están.
El libro de Lucas nos habla de una ocasión en la que dos discípulos "iban... a una aldea llamada Emaús, que estaba a sesenta estadios de Jerusalén. E iban hablando entre sí de todas aquellas cosas que habían acontecido. Sucedió que mientras hablaban y discutían entre sí, Jesús mismo se acercó, y caminaba con ellos. Más los ojos de ellos estaban velados, para que no le conociesen" Lucas 24:13-16. Iban tan absortos en su propio razonamiento, su propia evaluación de lo que acababa de ocurrir con la crucifixión de Jesús, que no pudieron ver cuando el SEÑOR mismo comenzó a caminar con ellos.
Cuando Jesús les preguntó a los hombres por qué estaban tristes, respondieron: " Entregaron [a Jesús] los principales sacerdotes y nuestros gobernantes a sentencia de muerte, y le crucificaron. Pero nosotros esperábamos..." Luc 24:20-21. Jesús ya había resucitado Y vencido la muerte, pero lo que en realidad fue una gran victoria todavía no era más que una derrota a sus ojos.
Este es el mismo dilema del que debemos guardarnos. Creemos que sabemos lo que Dios está a punto de hacer y formulamos en nuestra mente la imagen completa de cómo debe desarrollarse todo. Sin embargo, cuando no se desarrolla de la manera en que pensamos que debería, nos desanimamos.
Los hombres en el camino a Emaús estaban con incertidumbre por el futuro, con temores y tristes. Fue entonces cuando el SEÑOR se les apareció y esencialmente dijo: "Les abriré las Escrituras y les mostraré cosas que quizás aún no hayan considerado." En otras palabras, cuando todo parece perdido y más oscuro, cuando pensamos que la maldad triunfa sobre el bien, vienen las dudas, y el enfriamiento espiritual. El SEÑOR nos dice: Si el amor de muchos se ha enfriado por causa de la maldad, ustedes mis discípulos busquen mi presencia en Oración, vayan a mi Palabra, en ella encontrarán las respuestas a lo que está sucediendo. No se desanimen: Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de Él decían. Lucas 24:27
¿Estás dispuesto a dejar que el SEÑOR te abra las Escrituras y te muestre Sus caminos? Recuerda, ¡los caminos de Dios son más altos que los tuyos y lo que puede parecerte una derrota es en realidad victoria! Al igual que estos discípulos, pídele a Jesús que permanezca contigo y te muestre cómo se obtiene la fe, el amor al SEÑOR y la verdadera fortaleza.
"Si hay más maldad, nosotros buscaremos más al SEÑOR. Si los Cristianos profesantes no exhiben el espíritu de Jesús, vamos a pedirle al SEÑOR que nos dé siete veces de su Espíritu, para que podamos mantener la verdad....Ve a tu Maestro [Jesús] y pídele que avive el fuego dentro de ti, por si hay frío en cualquier otro lugar, que haya en tu corazón calor. ¡Que el SEÑOR te ayude a hacer esto, por el amor de Jesucristo! Amén." Y que Dios nos ayude a amarnos unos a otros en nuestra iglesia con profundo amor Cristiano. ¡Y que Dios nos ayude a amar cada alma que viene a sus pies! "A Jesús ven, a Jesús ven, y confía en Él. Él te salva, Él te salvará". Amén." Spurgeon