JUNIO 9

"CUANDO VIO LA FE DE ELLOS." Lucas 5:20
En los Evangelios se pone continuamente de relieve el hecho de que Jesús, cuando" VE LA FE", realiza el milagro. Es el caso del paralítico que pusieron a sus pies desde un agujero abierto en el techo. Luc 5: 20. Por encima de todo obstáculo llegaron al SEÑOR. El factor fe es indispensable; pero, apenas se verifica, el corazón de Jesús se proyecta a satisfacer las demandas de los necesitados que se dirigen a Él para que los ayude con su poder divino. El milagro es un "signo" del poder y del amor de Dios que salvan al hombre en Cristo. Pero, precisamente por esto es al mismo tiempo una llamada del hombre a la fe. Debe llevar a creer sea al destinatario del milagro como a los testigos del mismo.
Así, pues, el principio de la fe es fundamental en la relación con Cristo, ya como condición para obtener el milagro, ya como propósito por el que el milagro se ha realizado. Esto queda bien claro al final del Evangelio de Juan que dice: "Muchas otras señales hizo Jesús en presencia de los discípulos que no están escritas en este libro; y éstas fueron escritas PARA QUE CREAN que Jesús es el Mesías, Hijo de Dios, y para que creyendo tengan vida en su nombre" Juan 20: 30-31.
"Hasta donde sabemos, nadie le había dicho una palabra a Jesús acerca del hombre enfermo, pero realmente no había necesidad de palabras. Los obstáculos por los que los amigos habían pasado para llevar a este pobre sufriente a la presencia de Cristo, habla de una fe muy fuerte. La mejor evidencia de la Fe es el esfuerzo que hacemos para obtener el premio de la fe.
Abraham probó su Fe en primer lugar, cuando obedeció con prontitud el llamado de Dios y dejó su propio hogar y país, salió y no sabía adónde, simplemente siguiendo adonde Dios pudiera guiarlo. Volvió a demostrar su fe cuando se le ordenó ofrecer a su único hijo como holocausto, y obedeció sin dudar ni amonestar. Fue después de esto, que Dios dijo: "Ahora sé que temes a Dios, ya que no me has rehusado tu hijo, tu único hijo". No hay necesidad de palabras o declaraciones de fe, cuando existen tales actos de fe para asegurarla.
Dios puede ver la Fe. Puede verla en el corazón donde se ejerce, incluso antes de que haya habido alguna expresión de Él en palabra o acto; pero aquí el énfasis está en el hecho de que el ve nuestra Fe en la acción. Él se complace cuando mostramos nuestra fe por nuestras obras. Hay muchas oraciones sin palabras, y Dios las ve, aunque parezca que no las escucha. Hay en la Biblia al menos un caso en el que Dios prohíbe la oración hablada y, en cambio, ordena la acción. A la orilla del Mar Rojo, le dijo a Moisés: "¿Por qué clamas a mí? ¡Dile a los israelitas que marchen!" Éxodo 14:15
Así que debemos aprender a poner nuestra fe en acción inmediata. Hay momentos en los que debemos dejar de orar, levantarnos de nuestras rodillas y apresurarnos a cumplir con nuestro deber y actuar, según lo que el Espíritu nos impulse hacer. Dios quiere ver nuestra fe. - J.R. Miller