MAYO 9

08.07.2022

"No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de ustedes en la cárcel, para que sean probados, y tendrán tribulación....Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida." Apocalipsis 2:10


La persecución ha acompañado la historia de la iglesia del SEÑOR en todas las épocas, pero ella viene y va como el movimiento de las olas del mar. Y en la actualidad el índice de persecución mundial a los cristianos ha aumentado según "Open Doors", en español "Puertas Abiertas". Por lo menos, 245 millones de cristianos en todo el mundo sufren de persecución "fuerte" hasta "extrema". Esto significa que uno de cada nueve cristianos sufre discriminación y persecución por causa de su fe.


Nos advierte el SEÑOR por medio del Apóstol Juan: "No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación." Miremos como el SEÑOR no esconde a los suyos, el costo que puede llegar a tener el seguirle y servirle, en un mundo bajo la influencia de Satanás. La persecución, el sufrimiento y la opresión son temas ignorados, ya que vivimos en una sociedad que tiene como único objetivo evitar el sufrimiento en todos sus niveles, y es más difícil aún tenerlos presentes, cuando hay muchos predicadores que presentan un mensaje triunfalista que niega el sufrimiento y la persecución del pueblo de Dios, porque solo están enfocados en hablar de prosperidad, fama y éxitos.


En contraste, notemos cómo la iglesia en Hechos oró cuando los apóstoles se vieron bajo presión a causa de la persecución. No pidió para que mejorase la situación, sino por valentía para seguir testificando: "Ahora, SEÑOR, fíjate en sus amenazas y concede a tus siervos que anuncien tu mensaje sin miedo. Muestra tu poder sanando a los enfermos y haciendo señales y milagros en el nombre de tu santo siervo Jesús.» Cuando acabaron de orar, el lugar donde estaban reunidos tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y anunciaban abiertamente el mensaje de Dios. Hechos 4:29-31 Una cristiana perseguida, de 22 años de edad de la India, dijo al respecto: "No tengan miedo de la persecución. Es parte de la vida cristiana, y es un privilegio." Esta declaración coincide con la de Pedro y Juan cuando fueron perseguidos por causa Cristo: "Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre de Jesús". Hechos 5:41 Y esto es algo que no solo es contrario a nuestra naturaleza humana, sino también a nuestra actual actitud hacia la persecución..


Sin embargo, el rechazo al sufrimiento que caracteriza estos tiempos nos hace reacios a padecer a causa del evangelio, pasando por alto las muchas promesas dadas a quienes sufren por amor a Jesucristo. »Bienaventurados serán cuando los insulten y persigan, y digan toda clase de mal contra ustedes falsamente, por causa de Mí. Regocíjense y alégrense, porque la recompensa de ustedes en los cielos es grande, porque así persiguieron a los profetas que fueron antes que ustedes. Mateo 5:11-12. Romanos 8 nos resulta bien conocido a causa de que allí dice que "nada ni nadie nos podrá separar del amor de Cristo". Pero al leerlo, con facilidad pasamos por alto que el capítulo entero está relacionado con la tribulación sufrida por la causa de Cristo. Incluso en el versículo 36, Pablo se compara a sí mismo y a nosotros con ovejas que caminan hacia el matadero. Mientras seamos comparados con ovejas tiernas y felices, no tendremos nada en su contra, pero no nos place la comparación cuando se trata de ovejas que caminan hacia la muerte.


"No temas en nada lo que vas a padecer....Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida." Apoc. 2:10 El SEÑOR siempre está en el control de todo lo que nos pueda ocurrir. Satanás no puede hacer lo que quiera con los creyentes. Por ejemplo, tuvo que pedir permiso al SEÑOR para poder tentar a Pedro: "Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo" (Lc 22:31); lo mismo ocurrió en el caso de Job: "Y Jehová dijo a Satanás: He aquí, él está en tu mano; mas guarda su vida" (Job 2:6); y volvemos a ver lo mismo en las palabras de Dios a Abraham: "Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años. Mas también a la nación a la cual servirán, juzgaré yo; y después de esto saldrán con gran riqueza" (Gn 15:13-14).¿En qué consiste ser fiel hasta la muerte? En el contexto de esta carta hemos de pensar necesariamente que tenía que ver con sufrir el martirio por causa de la fe, pero no debemos limitarlo exclusivamente a eso, sino que debemos pensar también en la fidelidad al Señor en toda nuestra manera de vivir hasta el día en que él decida llevarnos de este mundo a su gloria eterna.El premio que el Señor les daría sería la "vida", que aunque en primer lugar se refiere a la vida eterna, también implica un premio o recompensa especial en la vida eterna. Leemos en el libro de Hebreos 11:36-37 como por la fe los creyentes permanecieron firmes pese a la persecución: "Otros fueron torturados.... Otros experimentaron insultos y azotes, y hasta cadenas y prisiones. Fueron apedreados, aserrados, muertos a espada. Anduvieron de aquí para allá cubiertos con pieles de ovejas y de cabras; destituidos, afligidos, maltratados." "Pero de la misma manera que Jesús venció al morir, los creyentes también vencen a este mundo siendo fieles hasta la muerte.


Las pruebas ponen al descubierto si nuestra fe es genuina: Para que la prueba[a] de la fe de ustedes, más preciosa que el oro que perece, aunque probado por fuego, sea hallada que resulta en alabanza, gloria y honor en la revelación de Jesucristo; 1 Pedro 1:7 Pedro anima a los creyentes a perseverar y mantenerse firmes bajo la opresión del exterior. Dios permite que los creyentes pasemos por persecución, tribulación y sufrimiento, porque así como los metales se prueban en el fuego, y de ese modo son librados de la escoria, de igual manera nuestra fe debe ser probada. El SEÑOR utiliza el sufrimiento y la opresión para purificar y transformar a sus hijos. Él nos está preparando para el cielo, y allí no hay ninguna cosa que no sea genuina y pura.La persecución y el sufrimiento tienen su peculiar manera de recordarnos cuáles son las cosas realmente importantes, al forzarnos a depender radicalmente del SEÑOR y purificando así nuestra obediencia a Su voluntad. Los falsos creyentes no permanecen al enfrentar la persecución, en cambio, para el verdadero cristiano, la persecución o el sufrimiento fortalecen y refinan su fe. Y después de esto, una vez que se ha comprobado que nuestra fe es genuina, entonces Dios nos dará la corona de la vida. Aunque al considerar todo esto nunca debemos olvidar que para que el SEÑOR nos pudiera dar esta "corona de la vida", él tuvo que llevar una corona de espinas y morir por nosotros en la cruz.


Por último recordemos orar por los perseguidos: No debemos olvidar a los hermanos que sufren persecución: "Acuérdense de los presos, como si también ustedes estuvieran presos con ellos. Piensen en los que han sido maltratados, ya que ustedes también pueden pasar por lo mismo." Hebreos 13:3 Estamos tan centrados en nuestros propios problemas y dolencias que nos olvidamos de orar por la iglesia perseguida en el mundo. Vemos esto como algo lejano, casos aislados que no nos pueden tocar a nosotros, pero la realidad es que la persecución a la iglesia viene en aumento a nivel mundial y cada vez se cierra más el círculo. Pidamos al SEÑOR fortaleza por los que sufren por Su causa y son perseguidos, y tengamos presente Sus palabras de advertencia: "No temas en nada lo que vas a padecer....Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida." (Tomado de LLamada de Medianoche y Luis de Miguel)