ENERO 9

"...Guíame, pues eres mi roca y fortaleza, dirígeme por amor a tu Nombre." Salmo 31:3
¿Cómo es que el SEÑOR nos guía? El factor más importante para determinar la guía de Dios es la condición espiritual de la persona. Debemos estar cerca de ÉL para poder oírle. Porque, fue al discípulo que estaba recostado sobre el regazo del Señor al que Dios le dio la Revelación (o el Apocalipsis) de Jesucristo. Y es a aquellos que permanecen en Cristo que Él les revela su mente y voluntad, la cual debemos desear fervientemente.
1.- Nos guía a través de la Biblia: Su voluntad general está establecida en las Sagradas Escrituras. Él nunca nos guiará en una forma que sea contraria a la Palabra. Pero, a menudo, habla a través de un pasaje o versículo específico de la Escritura. Leyendo la Palabra, ocurre que un versículo puede sobresalir como si Dios le estuviera hablando en forma oral. Puede que para otros no sea claro, pero para ti será una indicación definitiva de la voluntad del SEÑOR.
2.- Dios también nos guía a través del consejo de otros: "Escucha el consejo, y recibe la corrección, para que seas sabio en tu vejez"(Pr. 19:20). Generalmente, el mejor consejo viene a través de creyentes que tienen una cierta estatura espiritual. Pero, también existe la posibilidad de que una persona no creyente, sin saber que usted está buscando una guía, pueda decir la palabra correcta que responda a tu inquietud.
En cuanto a este punto, también, permítame advertirle que cuando el llamado de Dios viene a una persona, a menudo hay voces que nos ofrecen palabras desalentadoras. Cuando Dios llamó al campeón de cricket, C. T. Studd, algunos de sus amigos lo increparon: "Estás loco, vas a abandonar el cricket para ser un misionero. ¿No podrías esperar hasta que se acaben tus días en el cricket? ¿No tendrías más impacto para Dios como un jugador de cricket? ¿Que necesidad tienes de ir como misionero?" Si Dios realmente te está hablando, debes tomar esas palabras como cosas que te apartan del camino.
3.- Dios algunas veces habla a través de la maravillosa convergencia de las circunstancias (la llegada de una carta, o una llamada telefónica, por ejemplo).
4.- También nos habla a través del testimonio subjetivo del Espíritu Santo. Él puede obrar en su intelecto, en sus emociones, y en su voluntad, de modo tal que esté convencido que conoce Su voluntad. Debemos ser extremadamente cuidadosos cuando la guía es subjetiva. Sin embargo, permanece el hecho de que Dios puede hablar, y lo hace al moldear nuestros pensamientos y deseos, poniendo cargas en nuestro corazón."Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por Su buena voluntad"(afirma Fil. 2:13).
5.- El Señor puede guiarnos a través de algunos impedimentos. ¡Preste atención a lo siguiente! Y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió.Hechos 16:7 ¿Qué tipo de guía es ésta? Fue una guía a través de los impedimentos. Fue una guía por medio de la prohibición. Fue el ministerio de la puerta cerrada.Le sucedió al apóstol. Sus pensamientos eran resistidos y no tenían libertad. Sintió que su propósito recibía la oposición de una barrera invencible. En ciertas direcciones no sentía libertad espiritual y, por lo tanto, consideró que ese camino estaba bloqueado: "... el ángel del SEÑOR se puso en el camino por adversario suyo". Núm. 22:22 Dios, algunas veces, nos guía a través de las negaciones. Una puerta cerrada es una indicación de Su voluntad. Intentamos tomar un camino, pero el Espíritu no nos lo permite.
6.- Finalmente, nos puede guiar por el ejemplo de Cristo. ¿Qué haría el SEÑOR Jesús?: "Dios nunca nos guiará por un camino que no sea apropiado al carácter y a la enseñanza de Cristo". Algunas personas pondrán condiciones para confirmar la voluntad de Dios como Gedeón (lo cual leemos en Jue. 6:37 al 40). Esto significa que le pedimos a Dios que nos guíe, cumpliendo, o no cumpliendo, alguna condición que hayamos establecido. Sin embargo, si una persona está sujeta a la voluntad de Dios y está sinceramente dispuesta a cumplirla, no debería ponerle límites a Dios. Él puede amoldarse a nuestras debilidades.
Elías pidió que descendiera fuego del cielo. Antes de hacerlo, le pidió a sus hombres que vertieran cuatro cántaros de agua sobre el sacrificio y la madera. Luego, les ordenó una segunda vez que lo hicieran. Luego, una tercera. Elías no quería que una chispa casual encendiera el sacrificio. Él acomodó las cosas de tal manera que, cuando el fuego cayera, sólo pudiera ser la obra de Jehová. Así que, al procurar la guía, deberíamos acomodar las cosas de tal forma que la misma sólo pueda provenir de la Palabra del SEÑOR. "...Guíame, pues eres mi roca y fortaleza, dirígeme por amor a tu nombre."
Algunas veces la guía es muy clara. Otras veces no lo es tanto.Dios nos dirige un paso a la vez. No nos muestra todo el panorama. Pero, yo creo lo siguiente, nadie que verdaderamente esté desesperado por conocer la guía de Dios, dejará de conocerla. Su voluntad es buena, agradable y perfecta. Rom.12:2 No es como algunos piensan, peligrosa, desagradable y precisamente lo que no queremos hacer. -William MacDonald