JUNI0 6

Despierto, y aún estoy contigo. Salmo 139:18
En general, el significado de este verso implica tener una dulce comunión y relación íntima con Dios: "Nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo." 1°Juan 1:3.
De forma detallada el alma puede estar aún con Dios, de cinco maneras diferentes:
1.- El alma está con Dios POR LOS PENSAMIENTOS: Los pensamientos de David estaban siempre y continuamente corriendo hacia Dios: "¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos!" Salmo 139:17 La mente de David era una mina espiritual, en ella acuñó la mayor cantidad de oro; la mayoría de sus pensamientos eran celestiales y maravillosos. Los pensamientos en la mente, son como los viajeros van y vienen, pero los pensamientos de David, estaban viajando de continuo hacia la Jerusalén celestial. Incluso en los peligros, Dios -todavía- estaba con él- en las meditaciones de David, él -todavía- permanecía con Dios. Así, un cristiano permanece aún con Dios, está mirando Su gloria, sus pensamientos están todos empacados, listos y viajando directo hacia Dios.
2.- El alma está con Dios POR LOS DESEOS. Su ancla está echada en los cielos (Heb.6:19), y es arrastrado hasta allí por las velas del deseo. David tenía fuertes anhelos y fuertes latidos en pos de Dios. "¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti Nada deseo en la tierra." Salmo 73:25. El no dijo que no tenía nada en esta tierra, pues era rey, tenía su cetro y su corona, pero por sobretodo esto, deseaba a Dios. "Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía." Salmo 42:1; El alma del cristiano arde en deseos por lo divino y debe tener agua para apagar tal sed; suspira y se levanta luego de pasar por los refrescantes arroyos de la preciosa sangre de Cristo; y sus deseos se ven satisfechos, con razón.
Ahora sus deseos serán conformarse a Cristo en gracia y crecer en comunión con él en gloria: Desea al Sol de Justicia, no solo por sus cálidos rayos, sino porque se levantará trayendo en sus rayos salvación. Malaquías 4:2; desea no solo la presencia de Cristo, sino también su Imagen: SEÑOR, dame más de ti para que pueda ser más como Tú. Así, el alma, aún está con Dios mediante el deseo, y el salmista desea no solo misericordia, sino también gracia.
3.- El alma está con Dios MEDIANTE EL AMOR. Donde está el amor de un hombre, allí es donde también estará él; ¡cuánto se ensancha el corazón por aquello a lo cual amamos! Un siervo llamó al amor a Dios como "las alas del alma"; sobre estas alas, David voló hacia el cielo diciendo: "Aún estoy contigo". El amor tiene esta particularidad; une a pesar de la distancia; fija al corazón sobre el objeto. Así, aun cuando la esposa enferma de amor no puede ver a Cristo, lo abraza en sus afectos; cuando sus ojos no estaban sobre Él, aún, lo estaba su amor. "¿Habéis visto al que ama mi alma?" (Cantares 3:3). Cristo, mi amor está crucificado. Como Cristo fue clavado en la cruz, así también lo está en un corazón cristiano.
Un verdadero cristiano es como la tribu de Manases; Mitad de la tribu estaba del lado del Jordán, y la otra mitad en Tierra Santa. Así, sucede con el cristiano; mitad de él está en esta tierra y su otra mitad está en la tierra santa; su carne está en esta tierra, más su corazón está en los cielos. Como Pablo dijo en 2°Corintios 12:2; "si en el cuerpo, no lo sé; sí fuera del cuerpo, no lo sé". Su amor está en los cielos, reposa en el árbol de la vida(Cristo). El fuego del amor inflama y ensancha el corazón tan alto como los cielos.
4.- El alma aún está con Dios MEDIANTE LA FE; la incredulidad es llamada como un "alejarnos (un retroceder) de Dios" (Heb.10:39), y la Fe como un "acercamiento a Dios" (Heb.10:22). Por los ojos de la FE, mediante la perspectiva de una promesa, nosotros, miramos al cielo. El pueblo de Israel se ponía de pie en el atrio exterior del templo, pero el sumo sacerdote penetraba dentro del velo, al lugar santísimo; así, los sentidos están en el atrio exterior del cuerpo, pero la FE penetra en el velo; esto muestra a Cristo vestido con la túnica de nuestra naturaleza humana, y sentándose en la gloria sobre los ángeles.
La FE abraza a Cristo. La FE es el broche de oro que nos une a Cristo; por la FE nos vestimos del SEÑOR Jesucristo (Rom.13:14), por la FE lo recibimos y tomamos como alimento (Col 2:6), por la FE somos injertados en Él, como el pámpano en la vid (Juan 15:5). Sin duda, la vida de un creyente está fuera de sí mismo; vive más en Cristo que en sí mismo, como el rayo vive en el sol, como la rama en el tronco (Colosenses 3:3). Aún como Judá dijo respecto de Jacob; "su alma está ligada al alma de él" (Gén.44:30), así también el alma de un creyente está ligada con Cristo. Así, el alma llena de gracia, permanece para siempre con Dios por medio de la FE que viene de Cristo.
5.- El alma está aún con Dios durante TODA SU VIDA. No solo su corazón está en el cielo, también lo están sus palabras y acciones. De Cristo se dijo que : "...Había determinado a ir a Jerusalén" Lucas 9:53; Un buen cristiano debería ser reconocido por su rostro; su comportamiento debe reflejar que está de camino hacia la Jerusalén celestial. "Nuestra ciudadanía está en los cielos" Filip.3:20 Un cristiano verdadero es un ciudadano del cielo y no del mundo; se puede saber el lugar al cual pertenece por su hablar, sus gestos y sus hábitos. Hay una especie de brillo angélico sobre él; como lo hacía el rostro de Moisés cuando estuvo en el monte Sinaí en la presencia de Dios. Su vida es un gran pedazo de cielo sobre esta tierra.
Noé caminó con Dios (Génesis 6:9). Y en este sentido, el alma piadosa, aún está con Dios, camina infatigablemente con el SEÑOR; aunque encuentre obstáculos y dificultades en el camino, aún así, mantendrá sus pasos dentro del sendero. De esta manera, hemos visto en qué sentido un alma llena de gracia, está de continuo con Dios.
Puede que el águila, a veces, se pose en una rama baja, pero su nido, está construido en las alturas. Un cristiano camina sobre la superficie de esta tierra, pero su nido está asegurado sobre la Roca firme, Cristo Jesús. La luna puede verse reflejada en las aguas, pero aún así, su hogar está en el firmamento. Así, un cristiano, es visto aquí, pero está muy por encima de esta tierra; el "aún está con Dios". -Thomas Watson