NOVIEMBRE 5

28.11.2021

"El SEÑOR detesta a los orgullosos. Ciertamente recibirán su castigo." Proverbios 16:5

El orgullo como el amor al dinero, es la "raíz de todos los males", es el desencadenante de todos los demás pecados. El orgullo y la codicia son inseparables, porque el uno lleva al otro, donde hay orgullo hay codicia y viceversa, lo mismo que donde hay orgullo hay rebelión, desobediencia, incredulidad etc.... El orgulloso rechaza la Palabra de Dios cuando es confrontado por ella: Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Juan 3:20

El orgullo es un aprecio desordenado de sí mismo. Las características principales de una persona orgullosa son: Cree no deber a nadie lo que posee. No reconoce que todo don procede de Dios. Atribuye todo lo que tiene a sus propios méritos y fuerzas, y se vanagloria de lo que posee. Desprecia a los demás y desea que los demás piensen o sepan que tiene mucho. El orgulloso no se somete a la voluntad de Dios y quiere hacer su propia voluntad. Porque te enorgulleces y olvidando que eres solo polvo y ceniza: Acuérdate que como a el barro me diste forma; ¿Y en polvo me has de volver? Job 10:19

El orgulloso cree saberlo todo hasta lo que ignora, Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, así mismo se engaña. Gál.6:3 Es terco, obstinado, por estas razones hay pocas esperanzas de verlo convertido. "Afirmando ser sabios se volvieron necios." Rom.1:22 Así actuaron los escribas y fariseos, que desconocieron a Jesucristo, el verdadero y sabio Maestro, y no quisieron recibir de Él ninguna luz ni instrucción, también los falsos maestros y profetas, no quieren ver ni recibir la verdad, pero desean enseñarla. Donde hay orgullo hay rebelión, apostasía y desobediencia.

"De todos los pecados, el orgullo es el más peligroso para el alma. El orgullo es: una miseria dorada, un veneno secreto, una plaga oculta. El orgullo es: el ingeniero del engaño, la madre de la hipocresía y la envidia, la polilla de la santidad, la ceguera de los corazones, el que convierte las medicinas en enfermedades. De todos los pecados, el orgullo espiritual es el más peligroso y debe ser el más resistido. El orgullo espiritual es el levantamiento de la mente contra Dios; es un tumor e inflamación en la mente, y radica en el desprecio y menosprecio de Dios y en la elevación del ego, del yo, por razón de nacimiento, crianza, riqueza, honor, lugar, relación, dones o gracias. y en despreciar a los demás.

El orgullo espiritual es un veneno por el cual Dios es despojado de Su honor, y el alma de un hombre de su paz. El orgullo es un precursor seguro de la caída. "El orgullo va delante de la destrucción, y la arrogancia antes de la caída."Prov.16:18 Herodes cayó de un trono de oro a un lecho de polvo. Nabucodonosor cayó de ser un rey poderoso a perder la razón y comer con las bestias del campo. Adán cayó de la inocencia a la mortalidad. "Se acerca el día en que tu orgullo será abatido y solo el SEÑOR será exaltado. En ese día, el SEÑOR Todopoderoso castigará a los soberbios, haciéndolos caer al polvo". Isaías 2:11-12. -Thomas Brooks

" Avanzaba sin problemas; pero de repente tropecé en el camino y caí. Quedó al descubierto mi Soberbia y el SEÑOR por eso me rechazo. Aunque el Señor es grande, toma en cuenta a los humildes, y está lejos de los orgullosos. Salmo 138:6 Esta es la causa de la esterilidad de mi Alma y frialdad de mí entrega. ¡¡Mi corazón se ha secado como el Desierto!! Me siento incapaz de conmoverme con lágrimas de arrepentimiento, hasta ese extremo llega la dureza de mi corazón. No puedo saborear un Salmo, me repugna la lectura de la Palabra de Dios, me desencanta la Oración, no me hallo en el devocional diario. Me dejo llevar por la ira, me aferro al odio, soy complaciente con el exceso de comida y bebida, pero, indolente y torpe para reconocer a los demás. El SEÑOR mira de lejos al altivo, por eso No encuentro Paz, ni Paciencia, ni agrado en Nada..." Bernardo de Claraval

La humildad es el mejor antídoto contra el orgullo, lo abate y pulveriza, por tanto hemos de practicarla con la ayuda del SEÑOR, quien dijo: "Aprendan de mí que soy manso y humilde de corazón y hallarán descanso para sus almas." Mat.11:29 Que esta sea nuestra oración diaria: "SEÑOR, guárdame de los pecados de la soberbia; que no se enseñoree de mi; Entonces seré limpio, y estaré libre de gran rebelión" Salmo 19:13