SEPTIEMBRE  5

18.09.2021

El sana a los quebrantados de corazón, Y venda sus heridas. Salmo 147:3

Quebrantar es humillar el corazón para hacerlo humilde, manso y receptivo a la Voluntad de Dios. Los quebrantados son aquellos profundamente afligidos, que tienen el corazón roto, porque padecen alguna enfermedad grave, porque han perdido la esperanza, por la pérdida de un ser querido, por calamidades, por los fracasos de la vida, por el rechazo y desilusiones amorosas, o por la culpa que produce el pecado. Pero Dios envió a su Hijo, Jesucristo, para reparar los daños, para consolar, para dar esperanza.

El SEÑOR es el Médico Divino, "experimentado en quebranto", Isa.53.3 Es especialista en reconstruir y restaurar el alma destrozada y provee de paz y sanidad, por medio de su obra redentora en la Cruz del Calvario. "Para sanar un corazón quebrantado, Dios, además, ha designado a un Médico cuya ciencia es infalible, cuya bondad y cuidado son iguales a su ciencia. Este médico no es otro que el Hijo de Dios. Con este atributo nos ha sido dado a conocer. «Quién tiene necesidad de médico sino el que está enfermo.» Marc.2:17 El profeta Isaías presenta su advenimiento en el lenguaje más sublime: «El me ha enviado a vendar a los quebrantados de corazón, proclamar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel.» Thomas Blackley

Medita en los beneficios del quebrantamiento: Un corazón quebrantado se hace aceptable y agradable a Dios: "Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú oh Dios." Salmo 51:17 Despoja de toda soberbia, haciendo el alma apta para que Dios habite en ella: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados. Isaías 57:15. Acerca a Dios: "Cercano está el SEÑOR a los quebrantados de corazón." Salmo 34:18. Prepara para recibir el bálsamo restaurador y salvador de Cristo; juntaré la que cojea, y recogeré la descarriada, y a la que afligí; Miqueas 4:6 Endereza tus pasos y te pone en el camino que va al cielo, donde secará Dios toda lágrima, donde no habrá más llanto ni dolor, y donde todo será nuevo. Apocalipsis 21:4.

Un espíritu quebrantado lleva el poder restaurador de Cristo, Jacob fue quebrantado en Peniel cuando luchó con Dios. Gén, 32:22-30 María fue quebrantada en Betania cuando Lázaro murió. Un espíritu quebrantado y humillado lleva el perfume de la adoración sincera y pura al SEÑOR: La pecadora que ungió los pies de Jesús, con perfume de nardo puro de gran precio, Lucas 14:3 "Estando detrás de Él a Sus pies, llorando" Lucas 7:36-38 Sus lágrimas manifiestan un corazón quebrantado, porque descubrió que la gracia del SEÑOR es mucho más grande que sus pecados, y aunque Él conocía lo peor de ella, la amó incondicionalmente y sin reproches. Porque Él, no nos ha tratado como merece nuestra maldad, Ni nos ha castigado como merecen nuestros pecados. Salmo 103:10

"A ti que estás quebrantado de corazón; Él te ha tomado ya el pulso. No debes dudar ni temer, diciendo: "¿Va a sanar el SEÑOR, a alguien como yo que ha sido un enemigo de la gloria de Dios? " Sí, responde el SEÑOR Jesucristo; si estás quebrantado de corazón, Yo te vendaré." William Fenner

El dolor y profunda tristeza por heridas del pasado causan amargura, afectan la salud física y mental. Así como una herida si no se trata se infecta y puede producir un shock séptico, esto es, que se esparce por todo el cuerpo y puede llevar a la muerte. Y las heridas del alma si no son tratadas por el Médico Divino, infectan el corazón con el veneno de la amargura o falta de perdón, que contaminan y afectan a quienes los rodean. "Cuídense de que nadie deje de alcanzar la gracia de Dios; de que ninguna raíz de amargura, brotando, cause dificultades y por ella Muchos sean contaminados." Heb.12:15 Está comprobado científicamente que el odio y la falta de perdón, causan depresión y problemas mentales, problemas cardíacos, úlceras, problemas gastrointestinales, de tiroides, cáncer, dolores en las articulaciones y los huesos. Y Jesucristo fue enviado para vendar las heridas de los quebrantados de corazón. Lucas 4:18 ¿Y cómo lo hace? Otorgando el perdón a todas nuestras fallas, culpas y pecados, y obrando de una manera sobrenatural aplica en las heridas profundas, el bálsamo sanador de Su Santo Espíritu, que invade nuestra mente y corazón, dándonos la capacidad para que nosotros también perdonemos el dolor y el daño recibidos, como Él nos ha perdonado. Perdonen a otros y serán perdonados. Lucas 6:37 EL PERDÓN, es la medicina más eficaz contra la raíz de amargura, alivia el dolor, da paz, te enseña a ser más tolerante con los errores de los demás, es la base de una restauración verdadera y te hace a imagen del SEÑOR.

Él SEÑOR toma nuestro corazón y lo restaura, lo renueva, lo transforma y hace nuevas todas las cosas. De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es, las cosas viejas pasaron y TODAS son hechas nuevas.2Cor.5:17 Por eso nos dice: «Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado. ¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en la soledad. Isaías 43:18-19 Sepulta tu pasado, no permitas que los fracasos y errores del pasado, te dominen, te agobien, y te impidan vivir y agradecer por tu presente y futuro, el SEÑOR te dice: Yo soy el que borro tus transgresiones por amor a Mí mismo, Y no recordaré tus pecados. Isaías 43:25 Yo soy tu presente y tu futuro. "Enséñanos a contar nuestros días, de tal modo que traigamos al corazón sabiduría." Salmo 90:12 SEÑOR, enséñanos a contar los días que nos quedan en esta tierra, porque el pasado nunca más regresará, de tal modo que vivamos cada día contigo, en tu presencia, con la paz y el gozo en nuestro espíritu que solo tú nos provees.

¡Miren, el Altísimo tiene que ver con los enfermos y los tristes, con los desdichados y los heridos! ¡El va por los hospitales como el buen Médico! Su profunda simpatía con los que lloran es una marca especial de su bondad. El SEÑOR siempre está sanando y vendando; esta tarea no es nueva para Él. Lo ha hecho desde antiguo; y no es una cosa del pasado de la cual ahora ya está cansado, porque todavía está sanando y vendando, como hacía al principio. ¡Vengan, corazones quebrantados, vengan al Médico que nunca se cansa de sanar; muéstrale tus heridas para que Él las sane y las vende! C. H. S. El sana a los quebrantados de corazón, Y venda sus heridas. Salmo 147:3