OCTUBRE 4

Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: «Yo haré llover pan del cielo para ustedes. El pueblo saldrá y recogerá diariamente la porción de cada día, Éxodo 16: 4
Cada día, debemos salir y encontrar alimento para nuestra vida espiritual. Aunque puede ser que algunos de ustedes están muertos en vida, sin Dios, y sin Cristo. ¡Que el SEÑOR les dé vida por Su Espíritu dador de vida! Dios nos dará maná del cielo, esto es, a Cristo, Él es ese Pan de vida que bajó del cielo, y debemos alimentarnos de Él. Los israelitas recogían temprano el maná que descendía cada mañana. Y nosotros hagamos lo mismo, leamos y estudiemos la Palabra y busquemos al SEÑOR diligente y sinceramente, pues Él ha dicho: "Me hallan los que temprano me buscan." Prov.8:17
.- El maná estaba siempre encerrado en el rocío: Ellos ponían cuidado en recogerlo, pues entonces se convertía en un dulce rocío para ellos. ¡Que la Palabra del SEÑOR esté envuelta siempre de rocío para ustedes! Pero el creyente tiene cuidado de no perder nada de lo que Dios ha revelado. Cada palabra es preciosa para él; cada jota y cada tilde; y bajo las influencias del rocío del Espíritu Santo, recoge fresco a Cristo constantemente, siempre nuevo; y ¡encuentra que Su carne es efectivamente comida, y Su sangre es verdaderamente bebida! Juan 6:55
.- El maná debía ser buscado continuamente: Así debe ser buscado el alimento espiritual. No tratemos de vivir del maná del año pasado. Las experiencias rancias constituyen un pobre alimento. No conozco ningún platillo que sea peor que la experiencia fría; ustedes necesitan una realización diaria de las cosas de Dios. Alimentémonos de Cristo cada hora, pues la comida de los años pasados será de poco provecho. Continuamente recorramos las praderas ovejas del Señor; vayan una y otra vez a los pastos verdes y delicados y a las aguas de reposo, para ser saciados.
.- Obtengamos el alimento para el alma poco a poco: El maná que recogía el pueblo era como una semilla de cilantro o como escarcha blanca. Éxodo 16:14 Núm.11:7 Así debemos estar agradecidos cuando recibamos esas semillitas de la Palabra de Dios. Si únicamente descubrimos un nuevo pensamiento, una idea fresca, guardemosla en el corazón. Una gran cantidad de estas semillas preciosas constituirán un alimento exquisito para un espíritu hambriento.
.- Hay que inclinarse para recogerlo: Supongo que para recoger el Maná diario lo hacían de rodillas, pues siempre estaba colocado sobre la arena del desierto. Esa es la forma de recoger el alimento celestial: Con humildad, inclinándose hasta el propio suelo en oración, y así, recoger el Maná Celestial.
.- El Maná es para el consumo inmediato: Siempre que recibas una promesa divina, anda y ora con base en ella, y úsala de inmediato. No dejes que ni una sola parte de la Palabra de Dios permanezca vacía. Si algo de la Palabra de Dios se graba en tu mente, deja que penetre hasta tu alma, y debes ponerlo en práctica. Cómete el maná tan pronto lo recibas, y usa para gloria de Dios la fortaleza derivada de él
En relación a las NECESIDADES TEMPORALES EL SEÑOR NOS ENSEÑA:
1.- Nuestras provisiones dependen de Él. Como el maná provino de Dios, todas tus provisiones deben venir de Dios, bien sea que provenga por segundas causas y fuentes intermedias, todo lo que recibes procede de Dios.
2.- Nuestras necesidades están aseguradas por la fe: Si el maná no faltó durante cuarenta años, tampoco el SEÑOR dejará de suplir tus necesidades. Tu Dios te dará tu ración, si tú en verdad eres Su hijo. Te dará tu porción diaria, y recibirás lo mejor. "Mi Dios, pues, suplirá Todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús." Fil.4:19
3.- Nuestras provisiones tendrán que ser recogidas y preparadas por nosotros mismos: Dios envió del cielo el maná; pero el pueblo tenía que salir cada mañana, y recogerlo; y cuando lo recogían, leemos que solían macharlo en morteros o molerlo en molinos, lo cocían y preparaban tortas. Dios no es patrocinador de la holgazanería. Él quiere que Su pueblo trabaje; y Su regla es: "Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma",2Tes.3:10 Una regla que aplica a los que son perezosos. Pero, amados, damos gracias a Dios por el trabajo, aunque este vino al principio como una maldición, Dios lo ha convertido en una bendición.
4.- Nuestras provisiones deben contentarnos, los hijos de Israel la porción para cada día. No gozaban de lujos, pero tenían lo suficiente, y si lo hubieran pensado bien, las misericordias diarias de Dios eran un lujo para ellos. Si hubiese enviado una gran lluvia de dádivas y les hubiese ordenado recoger una vasta provisión, y que la llevaran consigo en todas sus travesías, no habrían aprendido tan bien acerca de Su cuidado, como cuando lo enviaba renovado cada día. El SEÑOR nos enseña que no sólo cuida de cada uno, sino que cuida de cada uno, cada día y cada momento, siguiendo nuestras huellas, y repartiendo el suministro completo del momento, para cada necesidad particular que se presenta. ¡Oh, que Dios nos enseñara a confiar en Él en cuanto a las cosas temporales!
¡Que Dios los bendiga! ¡Que haga que Su Palabra sea más dulce para nosotros cada día de nuestra vida! ¡Que haga que tengamos buen apetito para alimentarnos de ella! En cuanto a ustedes, que no han conocido nunca el sabor del alimento celestial, ¡que el SEÑOR les de vida por Su propio Espíritu dador de vida, por Cristo nuestro SEÑOR! ¡Amén! -C. Spurgeon