MAYO 3

Transformaré el desierto en estanque de aguas, Y la tierra seca EN MANANTIALES. Isaías 41:18

La palabra "Desierto" en la Biblia simboliza desolación, esterilidad, peligro, despojo, aflicción, mientras que la palabra "Manantial" significa fe, amor, esperanza, abundancia de gracia para perdón, vida y salvación. Estamos viviendo en un mundo destruido por la guerra, la violencia, cambios climáticos extremos, pandemias, y la multiplicación de la maldad que es como un desierto de inmoralidad. Pero justo en medio de este desierto podemos encontrar en Dios manantiales de amor, paz y abundancia de vida. Agar, cuando fue expulsada de la casa de Abraham y viajó por el desierto, se le acabó el agua. Tanto ella como su hijo estaban hambrientos y listos para morir de sed. Mientras ella clamaba, Dios le abrió los ojos y vio un pozo de agua". Gén.21:14-19 ¡Encontró un manantial en el desierto! Cuán cierto es esto de nuestras propias vidas. Pasamos hambre y sed justo en medio de la abundancia. Estos son algunos de los manantiales en el desierto que podemos encontrar en el SEÑOR nuestro Dios:

.- LA FE es un manantial en el desierto. Es, pues, la fe, la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Hebreos 11:11 La fe en Dios es como un manantial en el desierto. La fe es un poder interior por el cual captamos posibilidades invisibles. Es la mano que se extiende hacia la oscuridad y lo invisible y se apodera de las cosas que no existen. La fe ve a través de montañas de dificultades y atraviesa la luz del otro lado. La fe es la pionera del alma que va adelante y planea grandes cosas para la vida. Un hombre de fe no se desanima. La fe es como un ancla que se mantiene firme en medio de las tormentas de la vida. Recuerda, el desánimo lo pone a uno en el lado oscuro y sombrío de la vida. La fe tiene una perspectiva brillante de la vida. Pone un rayo de luz debajo de cada nube oscura y convierte la noche en día.

. EL GOZO es un manantial en el desierto. El gozo es un fruto del Espíritu Santo. Gálatas 5:22 La alegría es como un vino celestial que pone la fuerza, el poder y entra en el alma. El gozo es el júbilo que surge del sentido de la misericordia de Dios comunicada al alma en el perdón de sus pecados. La alegría del alma en el amor de Dios,en la paz permanente que posee y la perspectiva de la gloria eterna de la que tiene el anticipo en el perdón. Entonces, todo el poder del alma parece despertarse, y los dones escondidos salen a la luz bajo la energía estimulante del gozo celestial. La cara y los ojos brillan. Los creyentes llenos de alegría son renovados. Pero cuando un creyente pierde este gozo celestial, la vida piadosa y de oración se convierte en una carga pesada difícil de llevar.

.- EL AMOR es un manantial en el desierto. El amor es otro fruto del Espíritu Santo. Gal. 5:22 El amor expulsa la ira, los celos y todos los enemigos del alma humana. La malicia, la ira, la envidia no pueden vivir en el alma del amor puro. 1Cor. 13:1-9 Dios es amor y Su amor endulza la disposición, controla la lengua y le da a uno una personalidad fuerte y cautivadora. El amor de Dios embellece el alma. En esta era en la que la locura por la belleza parece volver loca a la gente, donde las mujeres recurren a la dolorosa operación de estiramiento facial y se gastan millones de dólares en belleza artificial, es maravilloso descubrir el secreto de la belleza real. ¿Sabías que el amor de Dios es tan poderoso que afecta los modales y el tono de la voz? El mismo rostro que alguna vez fue duro y de ceño fruncido, adquiere un aspecto suave y tierno. Los creyentes bajo esta bendición son embellecidos. El amor trae alegría, esperanza, buena voluntad.

.- LA ESPERANZA es un manantial en el desierto. "Y la esperanza no desilusiona, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo que nos fue dado." Romanos 5:5 La esperanza tiene que ver con el futuro. Las cosas que no responden a la expectativa, engañan y se pierden; Pero la gracia de la esperanza es de tal naturaleza, que nunca falla no engaña ni decepciona. Muchos yacen languideciendo en el hospital de la esperanza, porque la esperanza que se demora es tormento del corazón; Prov. 13:12 Así estaba el paralítico del estanque de Betesda, Juan 5:1-5. Pero cuando Jesús lo vio y sabiendo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: "Levántate, toma tu lecho, y anda." Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Juan 5:6-9. ¡Qué felicidad tan grande para este paralítico! Pues árbol de vida es el deseo cumplido. Prov.13:12

.- El CONTENTAMIENTO es un manantial en el desierto: No amen el dinero; contentos con lo que tienen, porque Dios ha dicho: «Nunca te dejaré ni te abandonaré.» Hebreos 13:5 Una persona que tiene una mente contenta vale millones. Algunos piensan que la satisfacción solo se encuentra en las riquezas y los lujos. Encontrará más descontento y angustia entre los multimillonarios que en cualquier otra clase del mundo. Sabemos que hay millonarios que se suicidan, se deprimen y escapan de su insatisfacción en las adicciones. Lo cual prueba que la felicidad y el contentamiento no se encuentran en las cosas externas. El verdadero contento viene de la obra de Dios en el nuestro interior. Contentamiento significa armonía, descanso, quietud del alma, y cuando todas las notas discordantes del pecado y la insatisfacción son expulsadas. Es cuando el Espíritu Santo, se posa y se anida en un pecho satisfecho, puede exclamar: " "Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo;" Salmo 42:2 "SEÑOR, Tú eres lo único que debe anhelar mi vida, tu eres el Único que puede satisfacer mi alma".

- LA ORACIÓN es un manantial en el desierto. ¿Qué es la oración? La oración se nos da bajo la figura del incienso. ¿Qué era el incienso? "Estaba compuesto de especias de diferentes tipos molidas o trituradas y luego quemadas en un incensario encendido para que su forma desapareciera y subiera como una dulce fragancia, y luego se colocaba sobre el altar de oro. Es el corazón el altar del SEÑOR, quebrantado el que real y verdaderamente ora, cuyo clamor sube ante el SEÑOR como un perfume de olor fragante. El incienso quemado: Es solo cuando nuestras oraciones son tocadas por los fuegos del altar del cielo que realmente ascienden a Dios. La oración es una fragancia. El aroma es invisible por lo tanto, la oración es esa fuerza invisible que sube a Dios. Existe lo que se conoce como oración ordinaria y oración extraordinaria. Siempre que el creyente llega a ese estado en el que el Espíritu Santo lleva su oración y sus propios pensamientos a la misma presencia de Dios, algo sucede. Se enciende y aviva el corazón; los demonios son echados fuera; los enfermos son curados; el cielo y la tierra se unen.

Aconseja el Apóstol Pablo: "Sean conocidas sus peticiones delante de Dios en toda ORACIÓN y ruego, con acción de gracias. Y la Paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y pensamientos en Cristo Jesús. Gál. 4:6-7 "Familiarízate con Dios y estarás en paz", Job 22:21 . Oren, "para que su gozo sea pleno", Juan 16:24 . David oró para calmar sus disgustos, Salmo 6: 1-10, Salmo 116:1,19 , y luego clamó: "Vuelve, alma mía, a tu reposo". Derrama tu corazón delante del SEÑOR; ¡Tendrás entonces la paz de Dios, esta joya tan preciosa que jamás ha conocido el corazón del hombre! Haz lo que te aconseja Pablo: 1. Ora por tu necesidad y da gracias por lo que tienes: (un sacrificio de alabanza se llama "ofrenda de pago" o "ofrenda de paz", porque sobre él sobreviene la paz). 2. Lo que ustedes aprendieron y recibieron de mí; lo que de mí vieron y oyeron, pónganlo por obra, y el Dios de Paz estará con ustedes. Fil.4:9 Porque así como toda flor tiene su dulzura, toda buena unión tiene su consuelo.- John Trapp

Acsa, la hija de Caleb, encontró estos manantiales. Ella pidió a Caleb, su padre, una bendición muy especial. Pidió manantiales, y él le dio "las fuentes de arriba y las fuentes de abajo". Jueces 1:15 Los manantiales de arriba o fuentes superiores representan cosas más altas y mejores: manantiales de fe que nos mantienen confiados a pesar del desánimo, la oposición y el poder del diablo; manantiales de oración que son encendidos por el Espíritu Santo, son soplos de aliento del cielo por los que sabemos que Dios responderá de acuerdo a sus propósitos y a voluntad buena, agradable y perfecta. Manantiales de amor que calientan el corazón y endulzan las disposiciones, los malos temperamentos y nos ayudan a amar a los que no son amables; manantiales de alegría que brotan de la cima eterna de la gloria; manantiales de esperanza y paz, que nos dan una perspectiva luminosa de la vida. "Los que a Él miraron, fueron iluminados;" Salmo 34:5 Manantiales que brotan para vida eterna. Juan 4:14

Tu vida puede ser como un desierto desolado y abatido, o como un jardín bien regado. Ven a Cristo, entrégale tu corazón árido, seco sin esperanza de vida, en Él están contenidos todos los manantiales de bendición. Salmo 87:7. Serás como un ciudadano recién nacido de Sion, y le adorarás como la fuente de tu salvación. En Él beberás las aguas de vida, fe, amor, paz y gozo en el Espíritu que vivifican y restauran el alma. Entonces, el SEÑOR te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan. Isaías 58:12 Que el SEÑOR Jesucristo, ocupe el trono de tu alma, convirtiendo los fracasos en victoria, y todo lugar desierto en verdes pastos y manantiales de alegría para siempre....¡Amen! - John Hames