DICIEMBRE 27

"NO TEMAS, Abraham; yo soy TU ESCUDO Y TU RECOMPENSA será sobremanera grande". - Génesis 15:1.

En este verso es la primera vez que la Biblia menciona "NO TEMAS", lo dice a un pecador que simplemente le creyó a Dios cuando le habló de la Simiente Prometida. Y es para ti también, que crees en el Prometido. La segunda vez en la Biblia que se habla de "NO TEMAS" está en Génesis 21:17."No temas, porque Dios ha oído la voz del muchacho". Le habla amablemente a Agar quien poco antes había tenido la visita del Ángel de la Alianza Génesis 16:10. ¿Ha quitado el SEÑOR tu gran carga de pecado? Entonces, "¿Qué te aflige? NO TEMAS" - Él ordena esta providencia para bien.

"NO TEMAS, porque yo estoy contigo y te bendeciré". - Génesis 26:24. Hablando con Isaac, que tenía al Dios de Abraham como su Dios. ¿Tienes molestia de vecinos envidiosos? Si el Dios de Isaac es tuyo, este "NO TEMAS" es para ti. " No temas prosperaras: «No se preocupen, NO TEMAN. El Dios de ustedes y el Dios de su padre les ha dado ese tesoro en sus costales.". - Génesis 43:23. Dios quita nuestras alarmas sospechosas, como lo hizo José con las de sus hermanos, aquí y en el Génesis 50:19, mostrándonos que Él ha recibido el pago total y tiene pensamientos de amor hacia nosotros. Así como Booz (Rut 3:11) quitó el miedo a Rut, al decirle lo que había en su corazón; y como David (1 Sam. 22:23) disipó el de Abiatar al declarar que ahora tenía de su lado a uno que moriría antes que verlo herido.

"NO TEMAN descender a Egipto". - Génesis 46:3. Dijo el SEÑOR a Jacob, cuando estaba a punto de emprender un viaje, en su vejez, bajo circunstancias de ansiedad. "Yo soy Dios, ¡NO TEMAS!" Esto te basta a ti, que sabes por experiencia que tu Dios ha salvado tu alma. A Israel en el Mar Rojo dijo el SEÑOR: "No teman; estén quietos y vean la salvación del SEÑOR". - Éxodo 14:13 ¿Te ha aclarado Dios el camino del deber? Entonces, no dudes en confiar en Él para que te ayude a superarlo. Tu camino se abrirá a medida que avances.

¡Qué diferente acontece cuando habla el hombre, y no Dios! Los que estaban junto a Raquel, Génesis 35:17, como los que estaban junto a la hija de Finees, 1 Samuel 4:20, dijeron "NO TEMAN"; sin embargo, la muerte vino. Y Jael se encontró con Sísara (Jueces 4:18) con las mismas palabras; pero el final fue la muerte.

"NO TEMAN, porque Dios ha venido a probarlos, para que Su temor esté delante de sus rostros, para que no pequen". - Éxodo. 20:20. En el Sinaí, cuando el pueblo sintió tanto la ley y la majestad de Dios que clamó por un Mediador. ¿Sientes lo mismo? Deja que te lleve al Mediador, Jesucristo, en quien está escondido tu pecado, y de quien viene el Espíritu de Santidad.

"NO TEMAS: Yo soy el Primero y el Último: Yo soy el que vivo y estuve muerto, y ¡he aquí! Estoy vivo por los siglos de los siglos, Amén; y tengo las llaves del infierno y de la muerte". - Apocalipsis 1:17. ¿Piensas alguna vez que debes temblar al entrar dentro del velo? o cuando el SEÑOR venga de nuevo en Su gloria? ¡No temas! Él pondrá suavemente Su mano sobre ti, te dará fuerza y se te mostrará a Sí mismo, ¡sí, Él mismo que murió y que vive para siempre por nosotros! Él mismo, que tiene tu nombre en Su corazón!.... ¿Es tuyo Cristo? ¡Entonces Sus promesas son tuyas! "NO TEMAS....; YO SOY TU ESCUDO Y TU RECOMPENSA" - Andrés Bonar

"TU RECOMPENSA SERÁ SOBREMANERA GRANDE." Dios no permitió que su siervo sufriera pérdida alguna por haber rechazado las ofertas del mundo. Valía infinitamente más para Abraham verse resguardado por el "escudo" del SEÑOR, que refugiarse que refugiarse bajo la protección del rey de Sodoma; esperar su galardón «sobremanera grande» que aceptar «los bienes» de Sodoma. La condición en que se ve colocado Abraham, en este verso representa de un modo admirable la que disfruta el alma mediante la fe en Cristo. El SEÑOR será su «escudo» para que se apoye en Él. EL SEÑOR será su «galardón» para que espere en Él, y así ahora el creyente halla su reposo, su paz, su seguridad, su todo en Cristo. No hay dardo del enemigo que penetre el escudo que protege al más débil creyente en Jesucristo.

En cuanto al futuro, solo Jesucristo le basta. ¡Preciosa porción, preciosa esperanza! Jamás se agotan sus bienes; la esperanza no le desilusiona, y la una y la otra resultan infaliblemente ciertas por el consejo de Dios y por la expiación llevada a cabo por Cristo. Ya disfrutamos de estas cosas mediante el ministerio del Espíritu Santo que mora en nosotros. Y ya que esto es así, es evidente que el creyente que opta por un proceder mundano, o que se deja llevar por los deseos carnales, no podrá disfrutar ni del «escudo», ni de la «recompensa».

Si se contrista al Espíritu Santo, no nos hará gozar de lo que constituye los «bienes» y la esperanza propios del creyente. Por eso, como lo vemos en esta parte de la historia de Abraham, después de haber vuelto de la batalla y rehusado la oferta del rey de Sodoma, Dios se le presenta bajo el doble carácter de «escudo» y «galardón.... y tu recompensa será sobremanera grande». Permite a tu corazón considerar esto porque contiene un volumen de verdad profundamente práctica. - Charles Mackintosh