JULIO 26

Y Caleb le dijo: ¿Qué tienes? Y ella(Acsa) respondió: Concédeme un don; puesto que me has dado la tierra del Neguev, dame también fuentes de aguas. El entonces le dio LAS FUENTES DE ARRIBA, Y LAS DE ABAJO." Josué 15: 18-19
En nuestras vidas hay dos clases de fuentes: "Las fuentes de arriba y las de abajo". Ellas son las bendiciones y las pruebas. Las de arriba son fuentes vivas, aguas que corren, no aguas estancadas, donde se halla gozo, y bendiciones que refrescan, renuevan, y fortalecen el alma. Las otras son las que reciben la provisión en medio del verano más sofocante y los más estériles desiertos de tristeza, dolor y de aflicción.
En la tierra perteneciente a Acsa, hija de Caleb, sus fuentes de abajo estaban en el Neguev bajo un caluroso sol y secas por el ardiente calor. Pero sus fuentes de arriba provenían desde los altos cerros con sus inagotables fuentes que enfriaban y fertilizaban toda la tierra.
Las fuentes espirituales de abajo son los momentos de escasez, tiempos de dificultad, los lugares desiertos, los lugares solitarios y aun los más ordinarios lugares de la vida, donde las fuentes Divinas dan refrigerio, refrescan, revitalizan, y restauran. No importa cuán difícil pueda ser tu situación, sea una gran pérdida, el dolor o la muerte, aunque abatidos, solos y agotados en medio del desierto, recuerda que siempre podemos encontrar las fuentes que fluyen de lo alto.
Abraham las encontró en los Montes de Canaán. Moisés las encontró en Elim Éxodo 15:27. David las encontró en medio de las cenizas de Siclag, cuando su casa fue quemada y su familia fue llevada cautiva:"Y David se angustió mucho...el pueblo hablaba de apedrearlo...mas David se fortaleció en el SEÑOR su Dios" 1 Samuel 30:6
Habacuc
las encontró cuando se secó la higuera, el campo no produjo, ni en los
establos había ganado, pero al beber de las fuentes de arriba, pudo
cantar: "Con todo, yo me alegraré en el SEÑOR y me gozaré en el Dios de
mi salvación.
Isaías las encontró en los terribles días cuando el Rey Senaquerib de Asiria invadió Judá, y parecía que las montañas habían sido arrojadas a la mitad del océano. Y por la fe pudo decir: "Hay un río cuyas corrientes alegran la ciudad de Dios...Dios está en medio de ella y no será destruida."." Salmo 46:4-5
Y nosotros podemos hallarlas durante todo el año. El SEÑOR siempre será nuestra fuente de arriba, de provisión continua y bendición inagotable, sus aguas nunca escasean porque Él es el Consolador de nuestras vidas y habita en nuestros corazones. Cuán valiosas son estas fuentes de arriba, y cuán grande es lo que se puede poseer de la plenitud de Dios, cuando las fuentes de abajo se secan y fallan! Acerquémonos confiadamente a estas fuentes de lo alto y digamos con el Rey David: "Todas mis fuentes están en Ti" Salmos 87:7. -A. B.Simpson
ORACIÓN: Las fuentes de mi fe y de todas tus gracias; amor, gozo, paz, justificación, liberación, salvación y vida eterna están en ti; las fuentes de mi vida y de todos mis placeres; las fuentes de mi actividad y de todos sus actos rectos; las fuentes de mi esperanza y de toda expectativa celestial, todo se halla en Ti, SEÑOR mío. Sin tu Espíritu Santo fluyendo como ríos de agua viva por mi vida, sería como un pozo seco, una cisterna cenagosa, destituida de poder para bendecirme a mí vida y la de otros. ¡Oh SEÑOR, Tú me aseguras que pertenezco a los regenerados cuya vida está en Ti; por tanto, te alabaré! - C. H. S