DICIEMBRE  24

24.12.2021

He aquí, les traigo buenas nuevas de gran gozo que serán para todo el pueblo; porque les ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el SEÑOR. Lucas 2:10-11

Mateo hace referencia al mismo acontecimiento diciendo: "Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados." Mateo 1:21 Jesús en hebreo significa Salvador, «porque Él salvará a su pueblo de los pecados». Es maravillosa la sencillez de la Navidad, celebramos el nacimiento de nuestro Salvador Jesucristo. En verdad; Este es el día que hizo el SEÑOR; nos gozaremos y alegraremos en él. Salmo 118:24.

Allí está María la madre. También José. Gente común, sencilla y simple. Allí están los pastores, la primera congregación navideña. Gente humilde que vivían apegados a las cosas creadas por Dios; la tierra era la alfombra por la que caminaban, el sol y las estrellas el techo que los cobijó. Sí, y allí está el niño también. No hay allí lujos ni pompas; solamente la sencillez de lo Divino. Y esta sencillez es lo maravilloso de la Navidad. Allí todos podemos llegar suplicantes, no es un trono de exaltación humana, sino el trono de la Divina sencillez. Allí todos podemos adorarle y reconocer en la sencillez del Niño, el significado del amor Redentor de Dios.

Allí podemos llevar nuestro gozo y nuestros sufrimientos. Nuestro gozo será bendecido y nuestras tristezas se harán más ligeras. Allí podemos recibir fortaleza y luz para los días venideros. Y la luz que resplandece desde el humilde pesebre tiene resplandor suficiente para iluminarnos hasta el fin de nuestros días. Entonces, allá vamos jóvenes, viejos, ricos y pobres, poderosos y esclavos, a adorarle en la hermosura de la sencillez Divina, maravillados de su sencillo pero inefable amor. Esta es la maravilla de la Navidad.

Ha nacido para ti, corazón cansado y agobiado; para ti que caminas con pies débiles y tienes las manos temblorosas, para ti llegan hoy noticias de lo alto que dicen que te ha nacido un Salvador que te habla en dulces tonos de amor. Sí, para ti ha nacido Jesús este día, si mansamente le das lugar y le suplicas que se quede contigo. Aunque el mundo entero sea partícipe de Él, Él lo es Todo para ti. Él reclinará la cabeza sobre tu corazón y derramará en ti su verdadero amor.

No pide palacios ni comidas costosas; sólo dulce amor, anda en busca de un seguidor amante y sincero a quien pueda conferir su bendición, que permita que su sonrisa le ilumine el sendero agotador. Para ti, aunque seas el más pequeño de todos los creyentes, para ti brilla hoy la estrella de Belén con alegre resplandor. Para ti, aunque poca sea tu fuerza y débil tu alabanza, para ti, qué tiemblas, vino tu SEÑOR y REY. Para ti, en esta Navidad, los ángeles cantan nuevamente su canción. -Carrie Judd Montgomery

ORACIÓN: ¡Oh mi dulce Jesús! que quisiste nacer humilde de una humilde sierva, y humildemente nacido quisiste ser envuelto en sencillos pañales, y reclinado en un pesebre: Concédeme misericordioso SEÑOR, que por tu dichoso e inenarrable nacimiento renazca en mi corazón la santidad de una nueva vida, para que cada día me humille mas y mas reconociendo y viéndome envuelto con el vestido de mi mortalidad, y así reclinado entre las estrecheces de la observancia de tu santa Palabra, pueda fácilmente llegar a la cumbre de la verdadera humildad: y ya que te dignaste hacerte participante de nuestra humanidad y mortalidad, concédeme también el que pueda un día participar de tu divinidad, eternamente en el cielo. Amen - Ludolphus