MARZO 24

"Has puesto nuestras maldades delante de ti, nuestros pecados secretos a la luz de Tu presencia". Salmos 90:8
Como nunca estamos fuera del
alcance de la mano de Dios, tampoco estamos nunca fuera de Su vista. Dios está
al tanto de nuestros pecados más secretos. Su ojo está tanto sobre los pecados
secretos como sobre los pecados expuestos. Dios tiene un ojo sobre nuestros
males más íntimos. Él ve todo lo que se hace en la oscuridad. No hay nube, ni
cortina, ni momento de oscuridad, que pueda interponerse entre los ojos de Dios
y los caminos de los hombres. "Los ojos del SEÑOR están en todas
partes, mirando a los malos y a los buenos". Proverbios 15:3
"Porque los caminos del hombre están a la vista del SEÑOR, y Él examina todas sus veredas". Prov. 5:21. En esta escritura Salomón habla principalmente de los caminos del adúltero, que generalmente se traman con el más astuto secreto; sin embargo, Dios ve todas las formas de pecados secretos. Ninguna audacia puede eximir al adúltero de la justicia de Dios, así como ningún secreto puede ser escondido de la mirada de Dios. Aunque los hombres se esfuerzan por esconder sus caminos de los demás y de sí mismos, es un esfuerzo vano porque nunca podrán esconderse de la mirada de Dios. Dios ve todas las cosas en la oscuridad, cuando las puertas y las ventanas están cerradas y las cortinas corridas.
No hay cosa creada oculta a Su vista, sino que todas las cosas están al descubierto y desnudas ante los ojos de Aquel a quien tenemos que dar cuenta. Hebreos 4:13 Aquellos pecados que están más cerca y que más secretamente acechan en el corazón, son tan obvios y odiosos para Dios como aquellos que están a la vista de todos. Dios ve todo; la noche más oscura, o la doble cerradura, o la cámara secreta, Él observa claramente todas las cosas en una desnudez perfecta. Dios tiene un ojo sobre las intenciones más íntimas del corazón y los movimientos más sutiles del alma. Ciertamente no hay criatura, ni pensamiento, ni cosa, que no esté abierta al ojo de Dios que todo lo ve. El SEÑOR conoce todos nuestros pecados secretos ¿Puede alguien esconderse en lugares secretos para que yo no pueda verlo? ¿No lleno yo los cielos y la tierra?" Jer. 23:24 "Si no puedes esconderte del sol, que es el ministro de luz de Dios, ¡cuán imposible será esconderte de Él, cuyos ojos son diez mil veces más brillantes que el sol!" (Ambrosio)
"Mis ojos están sobre todos sus caminos; no están ocultos de Mí, ni su pecado está oculto de Mis ojos". Jeremías 16:17 ¡Este es el agravante mortal de todo pecado que se comete ante Dios, en la presencia real del Rey de reyes! ¡La misma consideración de la omnipresencia de Dios debería armarnos valientemente contra el pecado! El ojo puro y celoso de un Dios que todo lo ve, debería impedirte pecar cuando piensas que nadie te ve: cuando cometes toda clase de inmoralidad sexual y lujuria, cuando consultas adivinos y hechiceros como Saúl. Cuando guardas rencor en tu corazón, cuando ambicionas riquezas materiales, como Acán que escondió en su tienda bajo tierra los tesoros que codició, pensando que nadie lo descubriría (Josué 7:21), así escondes y auto justificas tu codicia y orgullo con versos bíblicos aplicados erróneamente, te convences a ti mismo que es para Dios, que es lo que te mereces, que es para dar a otros y a los pobres como los discípulos que se enojaron por el perfume de mucho valor que fue derramado sobre el SEÑOR, Mat.26:6-13, pero en el fondo de tu corazón sabes que tus argumentos son solo para dar una apariencia de piedad a tu codicia y orgullo.
¡Vaya! ¡Qué ateísmo espantoso se encierra en el corazón de aquel que tiene más temor de la mirada del hombre que de la mirada y la presencia del Dios eterno! Aunque escape de la mirada de los hombres, ¡nunca escapará del juicio de Dios! Ya que, si después de recibir el conocimiento de la verdad pecamos obstinadamente, ya no hay sacrificio por los pecados. Solo queda una terrible expectativa de juicio, el fuego ardiente que ha de devorar a los enemigos de Dios." Hebreos 10:26-27-Thomas Brooks
"El hombre que camina con
el ministro de Dios, que sale delante del pueblo de Dios y se une a él, y luego
vive en pecado, ¡cuán miserable debe ser su existencia! Puedes empeñarte
en esconder tu hábito depravado, pero saldrá a la luz, no puedes evitarlo.
"No hay nada oculto que no haya de ser manifiesto, ni secreto que no haya
de ser conocido y salga a la luz. Lucas 8:17 Les imploro que no incurran en la
terrible culpa de los pecados secretos. Ningún hombre puede pecar poco en
secreto, pues en verdad engendrará más pecados. Nadie puede ser un hipócrita y
sin embargo tener una culpa moderada. Irá de mal en peor, y continuará así
hasta que su culpa sea publicada, será descubierto como el peor y más
endurecido de los hombres.
¡Pecador secreto! si te falta tener un anticipo de la condenación sobre la tierra; sigue en tus pecados secretos; porque ningún hombre es más miserable que el que peca secretamente pero trata de preservar su imagen ante los demás. Un pájaro atrapado en la red del cazador luchando por escapar, es mucho más feliz que aquel que se ha tejido a su alrededor una red de engaño, y se esfuerza por escapar de ella día con día, haciendo que los esfuerzos sean más difíciles y la red se haga más fuerte.
¿Cuál es tu pecado secreto? Sácalo a la luz. Dile ahora a tu propia conciencia cuál es. Confiésalo delante de Dios, y que Él te dé gracia para apartarte de ese pecado y cualquier otro, y ¡volverte a Él con pleno propósito de corazón! Tu culpa es culpa, sea descubierta o no, y si acaso hay alguna diferencia, es una culpa mayor, porque ha sido secreta. ¡Dios nos libre de la culpa del pecado secreto! ¡Oh, la miseria de los pecados secretos! Que esta sea nuestra oración: "Líbrame de los (pecados) que me son ocultos." Salmo 19:12 "SEÑOR, escudriña mi alma, prueba cada pensamiento; Aunque mi propio corazón no me acuse de caminar con un falso disfraz, ruego el juicio de Tus ojos. Oh, vuelve mis pasos cuando me extravíe, Y condúceme en Tu perfecto camino." - C.Spurgeon
Si estás en una situación de
pecado oculto, confiésalo delante del SEÑOR con lágrimas y verdadero
arrepentimiento. Recuerda: "No le irá bien al que oculta sus pecados, pero
el que los confiesa y se aparta será perdonado" Prov.28:13 Y ten presente;
siempre puedes encontrar perdón en Cristo: "Hijitos míos, estas cosas les
escribo para que no pequen; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para
con el Padre, a Jesucristo el justo." 1 Juan 2:1"