OCTUBRE  22

Porque ya conocen la gracia de nuestro SEÑOR Jesucristo, que por amor a ustedes se hizo pobre, siendo rico, para que ustedes con su pobreza fuesen enriquecidos." 2 Corintios 8:9.

"La gracia de nuestro Señor Jesucristo," hace referencia a las alturas desde donde el Salvador descendió. La venida de Cristo del cielo a la tierra para sufrir por nosotros, es llamada aquí "gracia." Un acto gratuito. La gracia fue el origen y la fuente de Su venida. Él siendo Dios, es amor, lleno de gracia y verdad, abandonó las esferas celestiales para poder llevarnos a ellas, a través de Su descenso a las profundidades de nuestra miseria.

SE HIZO POBRE EN LO EXTERNO: Mi SEÑOR nunca fue rico en posesiones en esta tierra. Mi SEÑOR no hizo fortuna alguna. Nació de padres humildes. No fue el hijo de un príncipe o el hijo de algún poderoso. Era conocido como el hijo del carpintero, al nacer fue colocado en un pesebre. Él fue tan pobre que yo no he leído nunca que haya dejado un testamento acerca de Sus bienes materiales en el mundo. Su única posesión eran los vestidos que usaba, que los soldados repartieron. Por tumba no contaba ni siquiera con Su propio sepulcro, sino que, ¡una tumba prestada dio refugio al Salvador! Así se hizo pobre, siendo rico.

SE HIZO POBRE EN LO INTERIOR: Fue abandonado, dejado solo por sus amigos y discípulos, Judas lo traicionó. Pedro lo negó. Incluso se sintió abandonado por Su Padre y Su Dios. "Dios mío, Dios mío, ¿porqué me has abandonado?" indica una pobreza de alma tan profunda, como ese cuerpo desnudo y lacerado indica la pobreza externa. Él había renunciado a todo: Su corona de gloria intercambiada por las espinas de la vergüenza; ¡el manto imperial de dominio fue arrojado, para que pudiera vestirse de Su propia sangre! ¡Ya no era más adorado, sino escupido! ¡Ya no era más reverenciado, sino despreciado, y hecho oprobio y abominación en medio de los pueblos! ¡Ningún trono, sino una cruz! ¡Ninguna luz ni brillo de gloria inmarcesible, sino las tinieblas de mediodía-medianoche! ¡Ninguna vida ni inmortalidad, sino "Consumado es" y la entrega del espíritu! "Nuestro SEÑOR Jesucristo por amor a nosotros se hizo pobre, siendo rico."

"Para que ustedes con Su pobreza fueran enriquecidos" Limpió y quitó todos nuestros pecados: El mayor milagro del que me he enterado es que el Cordero de Dios cargó con el pecado de los hombres, de tal manera que lo quita. Es "el cordero de Dios que quita los pecados del mundo." Jesús entregó su vida en la Cruz, como el Sustituto de los pecadores, "el Justo por los injustos": "Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero." Él, que era "Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos,"

Con su pobreza nos dio la riqueza de LA PAZ. El castigo de nuestra PAZ fue sobre ÉL Isaías 53:5 ¡Qué riqueza tan grande es la paz del corazón! el castigo por el cual nuestra paz se asegura se le impuso; lo tomó sobre sí mismo y lo soportó para que nosotros ¡tengamos paz! Él llevó sobre sí mismo, la culpabilidad, el temor de ser castigados, la angustia del peligro inminente. Nos dió la riqueza de vivir en la paz que sobrepasa todo entendimiento al sentirnos en comunión y reconciliados con Dios.

NOS DIOS LA RIQUEZA DE LA VIDA ETERNA. ¡Esta es una riqueza invaluable! Porque Cristo murió, nosotros vivimos; porque Él murió, nosotros no moriremos nunca. ¡Que tesoro tan grande! Con su muerte nos dió vida eterna. Él mismo dijo:"Todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?". Juan 11:26 La muerte es la separación del alma del cuerpo; la muerte, en su sentido espiritual más elevado, es la separación del alma, de Dios. Nosotros podremos conocer la primera muerte, la separación del alma del cuerpo; pero la segunda muerte, la separación del alma, de Dios, ésa nunca la conoceremos, pues Jesús la conoció por nosotros, cuando dijo: "CONSUMADO ES" Pero ahora, "sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no tiene más dominio sobre ÉL. Rom.6:9

Jesús No vino al mundo para hacerse pobre en relación al dinero para volvernos ricos con una riqueza mundana. Y aunque a muchos no les guste, es anticristiano e impío, que un cristiano viva solo con el propósito de acumular riquezas. Hay miles que únicamente viven para ahorrar, ahorrar, y hacer una fortuna. Dice Jesús: "Donde está tu tesoro(tu riqueza), está tu corazón." Mat.6:21 " No acumulen tesoros en la tierra...Acumulen tesoros en el cielo... Porque donde está tu tesoro(tu riqueza), está tu corazón." Mat.619-21". "A los ricos de este mundo, mándales que no sean arrogantes ni pongan su esperanza en las riquezas, que son tan inseguras, sino en Dios, que nos provee de todo en abundancia para que lo disfrutemos. Mándales que hagan el bien, que sean ricos en buenas obras, y generosos, dispuestos a compartir lo que tienen, que atesoren para sí mismos un buen fundamento para el futuro, que se aferren a la vida eterna. ."1Tim. 6:17-19

Jesús fue supremamente pobre; y nosotros, sí creemos en Él, seremos supremamente ricos con riquezas espirituales y eternas. Él se humilló. El camino al cielo requiere de humillación para ser exaltado. Cuando pienses que eres menos que nada, y consideres todo lo que posees como propiedad de Cristo, y libremente le entregues todo a Él, entonces te darás cuenta de lo que significa realmente ser un cristiano, y sólo hasta entonces. Reflexionemos en esto : "Todas las cosas son suyas, son el don de Dios, compradas con la sangre de un Salvador: Este mundo es suyo, y los mundos venideros: La tierra es su alojamiento, y el cielo su hogar." -C.Spurgeon

" Tal vez, algunos cristianos no poseen riquezas, viven "Como no teniendo nada pero poseyéndolo Todo." 2Cor.6:10. Esta es una paradoja que el mundo no puede entender. Un cristiano verdadero no puede ser pobre, es siempre el hombre más rico. Las riquezas de un cristiano no tienen fin. La experiencia nos dice que las billeteras y cofres de los hombres malvados pueden agotarse. Pero las riquezas de un cristiano verdadero nunca se pueden agotar, ¡porque él posee todas las cosas en Cristo y con Cristo!

Aunque no tiene nada en la mano, lo tiene todo en la esperanza. Un cristiano verdadero es el hombre más rico del mundo, porque tiene al Dios grande y glorioso comprometido por miles de promesas para poseerlas y bendecirlo, estar a su lado darle gracia y gloria, y no negarle nada que pueda ser bueno para él. Cuando los malvados se jactan de sus grandes posesiones y riquezas, un cristiano puede jactarse de Dios y decir: "¡Dios es mío! ¡Dios es mío! "Él es mi todo en todo"; Y es más rico que cualquier hombre malvado en el mundo ¡Sí, que todos los hombres malvados del mundo juntos! " -Thomas Brooks