JUNIO  21

No todo el que me dice Señor, Señor entrará en el Reino de los cielos, sino el que hace la Voluntad de mi Padre.... Mateo 7:21

Quiere decir: No todo el que hace uso del Nombre de Cristo, no todo el que reconoce Su autoridad y Su naturaleza divina, no todo el que nombra al SEÑOR en sus sermones para aparentar y calmar su conciencia, que evita decir la verdad solo para ganar adeptos y obtener ganancias, que no tiene verdadero y abundante amor para Cristo ni para Su obra en la Cruz, no tiene verdadera fe en Él, enseña pero no aplica la doctrina de Cristo, su objetivo por ambición personal es auto promocionarse, agradar a los hombres hacerse grande y auto exaltarse, establecer el poder de la naturaleza humana que es contrario a la gracia de Dios y a la justicia de Cristo. Los que actúan así, como dijo Pablo: Buscan sus propios intereses y no los de Cristo Jesús. Fil.2:21 Estos, No entrarán en el Reino de los cielos.

Dijo el SEÑOR: Aquel que escucha mis palabras y no las pone en práctica, será semejante al necio que edificó su casa sobre arena. Mateo 7:26 Porque los que edifican en robo,adulterio, fornicación, lujuria, hechicerías, borracheras y adicciones, ira y en las demás obras de la carne, trabajan mucho y también sufren mucho para llegar a sus fines perversos; y sin embargo, no sólo no recogen fruto, sino que reciben grande daño. Así lo dijo Pablo: "Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna." Gálatas 6:8

Sino el que hace la voluntad de mi Padre: El que arranca el árbol malo de las obras de la carne, que ama a Cristo, que anda en el Espíritu, que da frutos del Espíritu y continúa dando fruto para la gloria y alabanza de Dios, este entrará en el Reino de Dios. El Señor, con su amor infinito nos muestra el camino de la vida eterna, y cómo debemos tener presente que para llegar a Su Reino, es necesario estar atentos de andar en las obras del Espíritu; si no, no llegaremos. Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz. Rom.8:6 

Preguntemos con el salmista David: « ¿SEÑOR, quién puede habitar en tu santuario? ¿Quién puede vivir en tu santo monte? » Sal 15:1. Escuchemos atentamente la respuesta del SEÑOR y cómo nos enseña el camino para morar en este lugar: "El que anda en integridad y obra justicia, Y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, el que no hace daño a su amigo ni ofende a su vecino; El que su dinero no da a interés, Ni acepta soborno contra el inocente. El que hace estas cosas permanecerá firme. Salmo 15:2-5

El temor del SEÑOR hace que estos creyentes no presuman por sus buenos frutos, ni crean que ya alcanzaron la perfección, están alertas y tienen presente la advertencia del Apóstol Pablo: Quien piensa estar firme, tenga cuidado de no caer.1Cor.10:12. Además y principalmente están seguros que Todo lo que en ellos hay, No proviene de sí mismos sino del SEÑOR y dan toda la gloria a Dios: «No a nosotros, SEÑOR, sino a tu Nombre corresponde Toda gloria, por tu amor inagotable y tu fidelidad.» Sal 115: 1. Y con el apóstol Pablo dice: «Por la gracia de Dios soy lo que soy» 1 Corintios 15:10.