SEPTIEMBRE  19

18.09.2021

Después de despedir a la multitud, SUBIÓ AL MONTE A SOLAS PARA ORAR; y al anochecer, estaba ALLÍ SOLO.Mateo 14:23

Con frecuencia Jesús se apartaba para estar a solas con Dios y orar. Marcos 1:35, Lucas 6:12 ¡Que gran ejemplo nos dejó Nuestro Maestro, Jesucristo! Y quién más que Él puede enseñarnos la importancia que tiene el subir al MONTE para estar en la presencia de Dios, orando, apartado de toda distracción del mundo, y solicitar Su ayuda y fortaleza en tiempos de aflicción, para tomar decisiones cruciales, para buscar y hacer la Voluntad de Dios.

Subió a solas nuestro Maestro Divino, para instruirnos con Su ejemplo, sobre la importancia de la humildad, de orar en secreto, en absoluto anonimato. NO para ser visto de los hombres ni aplaudidos o halagados por ellos, sino del Padre que está en los Cielos. Nos dice el SEÑOR: "Suban al Monte, no para sentirse superiores, ni mejores ni más santos que nadie, porque es mi gracia la que hace todo esto posible. Recuerden siempre: "Dios atiende al humilde, y mira de lejos a los altivos."Sal.138:6

}

En el secreto y la soledad, Cristo, la Luz, hace que el alma del cristiano brille como el amanecer, sea hermosa como la luna, resplandeciente como el sol. Cant.6:10 Su gloria resplandece en quienes le buscan en el secreto; porque el mismo Dios que mandó a la luz brillar en las tinieblas, hace brillar Su luz en nuestros corazones para que en nosotros se irradie la Gloria de Dios, como brilla en el rostro de Cristo.2Cor.4:6 Mientras las tinieblas cubren la tierra, sobre el cristiano que habita en la soledad, resplandecerá el SEÑOR y sobre él será vista Su gloria. Isaías 60:2 En la soledad libre y despojado de todo interés mundano, su alma se va transformando de gloria en gloria por el Espíritu, hasta llegar a ser conforme a la imagen de Cristo. 2 Cor 3: 18 Y todo esto, es obra del Santo Espíritu de Dios habitando en él, quien también le impulsa e inspira a estar apartado en silencio, como lo expresó el profeta Jeremías: "Que se siente solo y calle, porque es Dios quien se lo impuso." Lam.3:28

" De verdad, vivir en la soledad, así, lleno del Espíritu Santo y habitando en el SEÑOR, es como vivir en un jardín de bellas y deliciosas frutas "a nuestras puertas": "Y a nuestras puertas hay toda suerte de dulces frutas" Cantares 7:13. Cuanto más vivimos en el secreto, más bellas y deliciosas son las frutas que nos deleitan allí, y tanto más bello es el mundo espiritual en que vivimos. Allí vivimos bajo la bandera de su amor: "Y su bandera sobre mí fue amor" Cant 2:4. ¿Y cómo vivimos en el secreto, o en la soledad? En el despojo completo de nosotros mismos, en el desprendimiento de todo lo creado. Esta es la manera de abrazar la cruz salvadora y vivificante de Jesucristo con todo el corazón y el cuerpo. En la cruz hay vida. En la cruz está Dios. En la cruz hay verdadera alegría. En la cruz hay esplendor y amor divino.

Cuanto más renunciamos al mundo y a sus deleites, tanto más encontramos deleites en el SEÑOR. Cuanto más nos volvemos hacia el interior, y dejamos a un lado lo exterior, tanto más abundantemente nos encontramos con el SEÑOR. Por eso vamos a las alturas, y a los lugares más remotos y vacíos de todo deleite creado; y allí descubrimos los gozos más intensos e íntimos del amor Divino. Así, la vida apartada y en comunión con el SEÑOR por la Oración, enriquece al mundo. Por lo cual, el SEÑOR, sale a nuestro encuentro adonde hemos ido a buscarle, en la cumbre de la montaña, y nos invita a vivir siempre con Él. Y nos dice: "Ven conmigo desde el Líbano, oh esposa mía; ven conmigo desde el Líbano. Mira desde la cumbre de Amaná, desde la cumbre de Senir y de Hermón...Cantares 4:8. En las alturas, habitamos con el Amado de nuestro corazón. ¡Qué bellos son los montes del Líbano, las cimas de Amana, Senir, y Hermón, montes cubiertos de nieve, blanqueados, refulgentes, llenos de la luz de Cristo! Así es la vida lejos del mundo en búsqueda del SEÑOR, vivida con nuestra tienda armada de manera permanente ¡en las cimas de la luz, CRISTO! ¡Qué vida espléndida y fulgurante es esta! ¡Qué belleza! ¡Qué riqueza!... " Steven Scherrer.

" Preséntate al SEÑOR, en la soledad, que nada te turbe; olvida, incluso, tu pueblo y la casa de tu padre; y el Rey de reyes, se agradará. ¡Oh alma santa! permanece solitaria y resérvate exclusivamente para el SEÑOR, a quien has elegido para ti entre todos. Huye de las gentes, huye hasta de tus familiares; aléjate de los amigos e íntimos. ¿No sabes que tienes un Esposo que anhela estar contigo a solas? Aléjate, pues, pero con el corazón, no corporalmente; con tu intención, con tu devoción, con tu espíritu. El Santo Ungido, CRISTO, que es tu aliento, busca la soledad de tu espíritu, no la del cuerpo; aunque a ratos no está mal que te separes también corporalmente durante la Oración, cuando las ocupaciones así te lo permiten. El SEÑOR te ha mandado cómo debes orar: Tú, cuando ORES, entra en tu aposento, y cuando hayas cerrado la puerta, ORA a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.Mat. 6:6

Jesús pasaba las noches orando a solas. No sólo se escondía de la multitud, tampoco admitía consigo a ninguno de sus discípulos ni familiares. Se apartó porque deseaba orar. Haz tú lo mismo cuando quieras orar.... Estarás solo con el SEÑOR: si no piensas en torpezas, si no te afecta lo presente, si desprecias lo que a muchos angustia, si te es tedioso lo que todos desean, si evitas toda discusión, si no te impresionan las aflicciones, si no recuerdas las ofensas. De lo contrario, no te encontrarás solo ni en la soledad más absoluta. ¿Ves cómo puedes vivir solo rodeado de muchos y entre muchos sólo? Puedes estar solo por frecuente que sea tu trato con los hombres." Bernardo de Claraval

¡Oh soledad, primavera cargada de flores de Jesucristo! ¡0h soledad, en la cual nacen ésas piedras preciosas, con las que está construida la ciudad del Gran Rey según el Apocalipsis! ¡Oh soledad, disfrutas familiarmente de Dios! Atraeré esta alma hacia mí, la conduciré a la soledad, y allí hablaré a su corazón. Oseas 2:14" Jerónimo