MAYO 17

02.05.2021

Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en Espíritu y verdad es necesario que le adoren. (Juan 4:23)

¡Debe llegar el momento en que tú dejes de vivir absolutamente en el ámbito del Yo! Debes dejar de existir en el Yo para que el Espíritu del Verbo eterno pueda habitar dentro de ti. ¡Mediante la renuncia de tu propia vida, abres paso para que Él venga a tu corazón! ¡Y es en el morir tuyo que Él vive! ¿Puede llevarse esto a la práctica? ¡Sí! Tu debes rendir todo tu ser a Jesucristo, dejando ya de vivir en tí mismo, para que Él llegue a ser tu vida. Porque ustedes han muerto, y su vida está escondida con Cristo en Dios. Col.3:3

Escóndanse en Mí ustedes que me buscan sinceramente. ¿Pero cómo te escondes tú en Dios? ¡Renunciando a tu Yo para quedar sumergido en Él! Tú puedes estar escondido en Él tan sólo mediante la aniquilación del yo. ¿Y qué tiene que ver eso con la adoración? ¡La aniquilación(muerte) del Yo es la verdadera oración de adoración! Es una oración que debes aprender -aprender en la absoluta totalidad de su más profundo significado posible. Esta es la experiencia que se rinde totalmente a Dios, y a Dios solo adora, para Él es toda la "alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos". (Apoc. 5:13)

Experimentar la aniquilación del YO es adorar a Dios en Espíritu y en verdad. (Juan 4:23) Toda adoración verdadera es "en espíritu". Para estar "en espíritu", el alma queda aniquilada. "En espíritu" entramos en la pureza de ese Espíritu que ora dentro de nosotros; quedamos apartados de nuestros propios métodos de oración psicosociales y humanos. Estamos "en verdad" porque quedamos colocados en la realidad del todo de Dios y la nada del hombre. "Dios es Espíritu; y los que le adoran en Espíritu y en verdad es necesario que le adoren" Juan 4:23

De hecho, hay tan sólo dos verdades: el Todo y la Nada.Todo lo demás es mentira. Dios es Todo; usted no es nada: "Pues polvo eres, Y al polvo volverás."Gén. 3:19. La única forma en que usted puede rendir la debida honra a Dios, es por medio de su propia aniquilación. Tan pronto como esa maravillosa obra queda hecha, Dios entra y se apodera de ti totalmente. Aquí hay un principio de la naturaleza: El SEÑOR no permite nunca que quede un vacío o hueco en la naturaleza. El viene al lugar del vacío y al instante lo llena consigo mismo. ¡El se pone en el lugar mismo de lo que ha aniquilado!

¿Pero no es amarga la aniquilación? ¡Oh! Si tan sólo supieras la virtud y la bendición que el alma recibe de haber pasado a esta experiencia. Una vez gustes de ella, no desearás tener ninguna otra cosa. Esta es la "perla de gran precio", el "tesoro escondido". Quienquiera que lo haya, gozoso vende TODO lo que tiene a fin de comprarlo. (Mateo 13:44- 45) Esta es la "Fuente de agua viva, que salta para vida eterna". (Juan 4:14) Y el Padre tales adoradores busca que le adoren.

El SEÑOR dijo que "el reino de Dios está entre (dentro de) nosotros"? (Lucas 17:21). Esto es cierto en dos maneras. En primer lugar, esto es cierto cuando Dios viene a ser el Dueño y SEÑOR dentro de tu corazón, tan completamente, que nada en ti se resiste a su dominio. Es entonces que tu ser interior, tu espíritu, es el reino de Él. Es entonces cuando Dios te posee completamente.

En segundo lugar, cuando poseemos a Dios, también poseemos Su Reino; y en Su Reino hay plenitud de gozo, delicias a Su Diestra para siempre. (Salmo 16:11) Nuestro propósito fundamental es gozarnos en Dios en esta vida. ¡Gozarnos en Dios! Este es el verdadero propósito por el cual fuimos creados. ¡Ay! Qué tan pocos comprenden que esto es alcanzable y que es tan fácil de adquirir.¡Servir a Dios es reinar! - Jeanne Guyon