MARZO  15

"Y escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y nadie cierra, y cierra y nadie abre...." Apocalipsis 3:7.

Aquí tenemos otros de los nombres, o descripciones de Cristo: -. El que es SANTO. El nombre de Cristo aquí es el de "el Alto y Sublime, que habita la eternidad, cuyo nombre es santo".Isaías 57:15 Él es el Santo de Dios, que odia el pecado y ama la justicia. Así, mientras Él es Santo, Él trata con amor a los débiles, y hace que sus enemigos "sepan que Él ha amado" (Apoc.3:9). Con toda la infinita ternura y piedad de Cristo, está unida la santidad, y Él dice: "Sean santos, como yo soy Santo".1Pedro 1:16

-. El que es VERDADERO. Esto se dice con frecuencia de Cristo: "Él que es fiel y verdadero"; la luz verdadera'; el pan verdadero;' la Vid verdadera; el testigo verdadero; el Dios verdadero. Él es: la realidad, la verdad, la sustancia, la sabiduría, el cumplimiento de todas las promesas y de todos los símbolos. Todas las promesas en Él son sí, y en Él Amén. 2 Corintios 1:20 Sus palabras son verdaderas, Sus obras son verdaderas, Sus caminos son verdaderos, Sus invitaciones son verdaderas, Su amor es verdadero.

-. El que tiene la LLAVE de DAVID. Tanto como Hijo de David como Señor de David, tenía derecho a todo lo que David tenía. De la corona, el trono y la tierra de David: Él era el heredero legítimo. Pero es sólo de la llave de David de lo que se habla aquí como el poseedor. Él tenía la llave, el derecho y el poder de abrir la puerta y admitir a los que tienen el derecho de entrada. Él puede abrir y ningún hombre puede cerrar: Esto es Gracia. Él puede cerrar y nadie puede abrir: esto es Soberanía. Esta combinación de gracia y soberanía que Él proclama aquí es lo que la iglesia necesita especialmente.

La referencia aquí es a Isaías 22:22:"La llave de la casa de David pondré sobre su hombro; y abrirá, y nadie cerrará; cerrará, y nadie abrirá. ." Esto se le dijo a Eliaquim, quien fue puesto así como un tipo de un mayor que él mismo, uno mayor que David. Eliaquim era un guardián de la casa, como José en el palacio de Faraón. Así que Cristo es representado no sólo como el poseedor real de la casa, sino también como Aquel a quien se confió el cuidado de su puerta. "Él es la puerta" Juan 10:9 y también es "el portero"; Juan 10:3. Él es el pastor y "Toda potestad le es dada en el cielo y en la tierra."Mateo 28:18 "El Padre ama al Hijo, y ha puesto todas las cosas en Sus manos."Juan 3:35

Podemos decir, que el SEÑOR Jesucristo posee muchas llaves:

.- Jesús tiene la llave de la CASA de David. Suyo es el palacio, y Él guarda la llave, como el Padre se la ha dado. Él abre y cierra según Su voluntad. Él es el verdadero David y tiene la llave de David, el verdadero Eliaquim: Él es el Hijo de David y el SEÑOR de David.

.- Jesús tiene la llave de la Torre fuerte de David. Además de su palacio, David tenía un fuerte en Sion que tomó de los jebuseos, una fortaleza contra el enemigo. Así como nuestro David tiene una torre fuerte y una fortaleza, en la cual corrían para resguardarse del enemigo y estar a salvo. Jesucristo es es la verdadera torre fuerte de David, construida para un arsenal.Torre fuerte es el nombre de Jehová; a Él correrá el justo, y estará a salvo. Proverbios 18:10 Porque tú has sido refugio para mí, Torre Fuerte frente al enemigo. Salmo 61:3 ¿Buscarías protección y salvación en esta Torre Fuerte inexpugnable? El que abre, y nadie cierra.

.- Jesús tiene la llave de la CIUDAD de David. ¡Sí, la llave de Jerusalén, tanto de la terrenal como la celestial! "Alcen sus cabezas, oh puertas" Salmo 24:7 Se oirán estos gritos, se aplicará la llave, y las puertas se abrirán de par en par, y entrará una gran multitud que nadie puede contar. ¿Entrarás a esta gloriosa ciudad? Debes acudir a Aquel que tiene sus llaves. Nunca se le hizo ninguna solicitud en vano. Ninguna otra llave sino la Suya te abrirá la puerta. "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo." Apoc.3:20 No somos simplemente nosotros los que estamos a la puerta de Cristo, ¡sino Cristo a la nuestra! Como si nos dijera: Toma la llave, ábreme y déjame entrar. ¿Será en vano la llamada de Cristo? Es el golpe del amor, del amor sincero, paciente y condescendiente. Él realmente desea la admisión. Su llamada no es una pretensión. Él quiere hacer de nuestras almas Su morada. ¡Admítelo, y sé bendecido!

.- La llave de la CASA DEL TESORO de David. Ese almacén contiene todo lo que necesitamos. Las riquezas inescrutables están, dice el SEÑOR: "Te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico." Apoc.3:18 Pero no solo las riquezas: el pan del cielo está aquí, el maná escondido está aquí, las vestiduras blancas están aquí, el vino real del reino está aquí. Toda la tienda de bienes celestiales de todo tipo está aquí. Nuestro David, Jesucristo, tiene la llave. ¿Quieres esta riqueza eterna? Ven y obtén gratis todo lo que necesites: oro, plata, piedras preciosas, pan, agua, vino y leche.

.- Jesús tiene la llave de la CASA DEL BANQUETE de David. Aquí se difunde la fiesta, una fiesta real; una fiesta nupcial; una fiesta divina; un festín de cosas grandes! El rey nos lleva a Su casa del banquete, y Su estandarte sobre nosotros es amor. Él arregla una mesa para nosotros en presencia de los enemigos. Él la está preparando dentro de poco en la presencia de los ángeles. Él dice: ¡Ven, come, bebe, sí, come y bebe en abundancia, oh amada!

¡Qué consuelo para un cristiano, es la verdad de que Cristo tiene las llaves! ¡Las llaves del universo, las llaves de cada esfera del trabajo, las llaves de la vida, de la muerte. ¡Qué consuelo es la verdad que Él tiene poder para abrir y cerrar! Todas las cosas están en Su poder. ¡Las llaves están en sus manos heridas! Ellas cuelgan de la cruz. ¡Trabaja, oh cristiano, con tus pocas fuerzas! Él abre puertas grandes y eficaces, por muchos que sean los enemigos. Él abre y nadie puede cerrar. Él cierra y nadie puede abrir. ¡Qué bendición es cuando dice: "He puesto delante de ti una puerta abierta!" Apoc.3:8 Oh débil cristiano, sigue adelante. Si Él está contigo, ¿Quién contra ti? "He puesto delante de ti una puerta abierta." - Horatius Bonar