DICIEMBRE  10

24.12.2021

"Así que, hermanos, les ruego, por las misericordias de Dios, que se presenten ustedes mismos como un sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. ¡Así es como se debe adorar a Dios! Romanos 12:1-2

Que respiremos esto y dejemos que se convierta en parte de nosotros ... que captemos el significado de esta Escritura y dejemos que nos cambie para siempre. Léelo de nuevo, medita en él por un momento. Este es el llamado de Pablo, el llamado de la Palabra, el llamado del Espíritu, las huellas de Jesús. Esta es la voluntad de Dios para ti y para mí: ¡Hacer de nosotros un altar, un sacrificio completo a Dios, que sea aceptable, puro, agradable, espiritual ¡Así es como se debe adorar a Dios!

Sabemos que lo que se hizo hace mucho tiempo fue hecho como una señal para nosotros de lo que estaba por venir, que el servicio del Antiguo Pacto era solo una sombra del servicio por venir Pero estos sacerdotes prestan su servicio por medio de cosas que no son más que copias y sombras de lo que hay en el cielo. Y sabemos que son copias porque, cuando Moisés iba a construir el santuario, Dios le dijo: «Pon atención y hazlo todo según el modelo que te mostré en el monte.» (Hebreos 8: 5).Juan les respondió: "Yo los bautizo en agua, pero viene el más poderoso que yo, del que no soy digno de desatar la correa de sus sandalias. Él los bautizará en Espíritu Santo y Fuego. " Lucas 3:16. Y se les aparecieron lenguas divididas como de fuego, que se posaron sobre cada uno de ellos. Y todos fueron llenos del Espíritu Santo ... "- Hechos 2: 3-4 Ahora, ¿dónde se encontró este fuego en los días de antaño? ¿Dónde se encontró este fuego en el tabernáculo del desierto? ¿Cómo predijo Dios este fuego a través de Moisés en el monte Sinaí? Podemos aprender algo de las Escrituras acerca de este fuego.

Recuerda que Isaac le preguntó a su padre: "He aquí el fuego y la leña, pero ¿dónde está el cordero para el holocausto?" (Génesis 22: 7.) Desde el principio los creyentes ofrecieron sacrificios en el altar, que significa lugar de sacrificio, lugar de encuentro con Dios. Incluso antes que Moises recibiera la ley. "Y Noé edificó un altar al SEÑOR, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció sacrificios sobre el altar". (Génesis 8:20) Sospecho que la ofrenda de Abel también se quemó en el fuego. Abraham construyó en tres ocasiones altares al SEÑOR. Génesis 12:7-8,13:4-18, 22:9 Isaac (Gén 26:26) y Jacob (Gén 33:20; 35:1-7), todos edificaron altares para sacrificios.

Entonces es aquí donde encontramos el fuego sobre el altar. "Y los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego sobre el altar ..." - Levítico 1: 7 "El fuego siempre arderá sobre el altar; no se apagará jamás". - Levítico 6:13 Los creyentes de hoy carecen tanto del fuego del Espíritu Santo, porque No experimentan Romanos 12: 1; no nos ofrecemos a nosotros mismos como sacrificios vivos, mucho menos santos y agradables. Por tanto, no somos bautizados por el fuego de Dios. No dejes que nadie te engañe. Nunca estarás lleno del Espíritu Santo hasta que ofrezcas tu cuerpo como sacrificio vivo y santo sobre el altar de la muerte. El altar es un lugar de muerte, donde se sacrifica el yo como una ofrenda, se corta en pedazos y se quema hasta que se convierte en ceniza. No queda nada.¡

El problema con los cristianos de hoy es que no mueren del todo a la carne y al mundo! ¿Crees que Pablo estaba muerto un día y vivo al siguiente? "¡De ninguna manera! Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él? (Romanos 6: 2) No se enseña esta verdad porque los falsos profetas y maestros no tienen cómo justificar su carnalidad, amor al mundo, al dinero y a las cosas de este mundo. ¡Lo que este mundo necesita desesperadamente es hombres y mujeres que estén muertos para sí mismos y vivos en Cristo Jesús, llenos del poder de la resurrección y que hayan obtenido la victoria sobre la tumba! Afirmamos tener poder de resurrección aunque no hemos muerto. Primero hay que morir para resucitar. Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Col. 3:1-2

¡Quiero ser quemado por el fuego de Dios! No quiero que quede nada de mí. ¡Quiero volver al polvo de la tierra para que Dios pueda crear un nuevo hombre de mí, a la semejanza de Su Hijo y con el poder del Espíritu Santo: !Entonces, del polvo de la tierra Dios el Señor formó al hombre, e infundió en su nariz aliento de vida. Así el hombre se convirtió en un ser con vida. (Génesis 2: 7) "Les ruego, por las misericordias de Dios, que se presenten ustedes mismos como un sacrificio vivo" El altar todavía está allí, esperando a que alguien se presente y esté dispuesto a que el cuchillo del Espíritu corte la carne y termine con su ego y propia voluntad de una vez por todas. El fuego Divino sigue ardiendo esperando que suba al SEÑOR ese olor fragante de un alma abandonada a Dios.

Por eso Cristo murió; no simplemente para redimir a un pueblo obstinado que permanece carnal y mundano, llegar al final al cielo, sino para levantar un pueblo para Su Padre celestial, santo y agradable a Dios, que lo adora en Espíritu y en verdad, sin amar sus vidas hasta la muerte, y que puede decir verdaderamente: "¡Has guardado el mejor vino para el final!" - Elí Brayley

SEÑOR, mi corazón he puesto en tu altar, pero leña para quemar no pude hallar: Fuego celestial necesito para hacerlo arder y así en olor grato a tí pueda ascender. Fracasa mi intento, el fuego no arde; en vano soplo, la llama no sale; SEÑOR, mira mis pobres esfuerzos y envía del cielo tu Santo Fuego. Todo lo que tengo, lo que soy y lo que quiero ser, fracasos, dudas, tibiezas, miseria absoluta, esfuerzos fallidos, ante ti lo pongo, Salvador, ¡SEÑOR mío! para que tu fuego del cielo, lo encienda...Amén